sábado, 29 de septiembre de 2012

Se lo que eres, no lo que haces

Con este titulo tan filosófico os introducimos un tema que es posible muchos de vosotros os encontréis en muchos clientes y casos de coaching, probablemente amigos y familiares, o incluso en vosotros mismos.

Por definición, la raza humana, todos nosotros, nos definimos la mayoría de veces en sociedad por aquello que hacemos : yo trabajo en un buffete de abogados laboral, yo soy ingeniero, yo soy cooperante en una ONG, yo soy psicólogo, yo hago traducción, etc. Nuestros estudios o experiencia profesional anterior marca la definición social que tenemos de nosotros mismos y ante la cual nos presentamos ante el mundo. En cierta manera, estamos obligados a ello para que los demás nos puedan “encasillar” en algún compartimiento de su mente que encaje con alguna definición pre-establecida (por ejemplo, Juan es notario… :-)).

Lo que ocurre que la definición de nuestra persona a través de nuestra actividad, si os dais cuenta, no tiene ningún sentido, ya que nosotros, en esencia, no somos “lo que esa actividad representa”, sino un conjunto de actitudes, talentos y valores que se armonizan y trabajan para conseguir un efecto deseado: curar personas, proporcionar bienestar a otros, facilitar la vida de terceros, etc. Eso es lo“que somos”, y es nuestro objetivo vivir de acuerdo a ello.

Tu misión en el mundo

Todo el mundo tiene unos talentos y una aportación que hacer a los demás que lo hacen excelente para una u otra actividad. Y todo el mundo tiene un papel que cumplir y una función única que aportar a la sociedad en la que vivimos. No existe ninguna persona que no pueda formar parte del puzzle social que conforma nuestra realidad y que no sea capaz de llevar a cabo su cometido con total felicidad y excelencia si se encuentra en el lugar o lugares adecuados a lo largo de su vida. Lo que ocurre, es que a veces somos la pieza del puzzle colocada en mal sitio o puesta al revés, y no encajamos en el área que nos fue designada y en la cual nos deberíamos sentir plenamente satisfechos con lo que hacemos.

Cuando el coach trabaja con valores y talentos, lo cual es parte primordial en casi cualquier proceso de coaching de vida o de re-orientación laboral, se intenta descubrir en que parte del puzzle se encuentra el espacio vacío esperando a esa persona que encaja a la perfección. Por decimos que definirnos en tanto a lo que “hacemos” no tiene sentido, ya que la vida nos encaja en tanto a “lo que somos”, y es ahí donde hay que provocar el cambio de visión y forma de entender la realidad a nuestro cliente.
Busca el fondo, no la forma

Pongamos que tenemos un cliente que nos cuenta que esta quemado de su trabajo, que nada le gusta ya, y que quiere cambiar, pero no sabe a que ni a donde. Nos cuenta que quizás le gustaría trabajar en una ONG, “por lo que hacen” y nos plantea que le ayudemos a preparar un plan de acción para llegar a conseguir su objetivo. Si nos ponemos manos a la obra y ayudamos a nuestro cliente a convertirse en un cooperante, ¿estamos seguros que es eso lo que realmente quería o necesitaba cuando nos pedía acompañamiento para un cambio de carrera profesional?

Yo siempre digo que primero hay que definir lo que somos, el fondo, porque luego la forma en la cual podemos expresar esto que somos puede tener mil posibilidades y manifestaciones distintas. Lo que somos esta definido por nuestros talentos y valores, y no por nuestros estudios o nuestra experiencia profesional. ¿Es que somos buenos de forma innata? ¿que nos motiva y nos da alegría?

Siguiendo con mi ejemplo personal, dos de mis características principales son que soy un motivador y un iniciador (pongo cosas en marcha para que otros luego las continúen), visto esto, ¿que forma puede tomar mi carrera profesional para “ganarme el pan” mientras cumplo con mi “misión” en la sociedad y aporto lo que otros no pueden aportar (solo yo puedo caber en mi hueco del puzzle)? Si hablamos de nuestro futuro cooperante, ¿que cualidades o talentos tiene que puedan ayudarle a encontrar una profesión que le haga feliz? Y luego, ¿encaja lo que nuestro cliente “es” con lo que ser cooperante requiere?

La forma de esto “que soy” puede adquirir es siempre múltiple y abierta a muchas realidades: vuelvo a mi ejemplo personal, yo puedo ser profesor y motivar a mis alumnos a desarrollarse como personas, puedo ser un jefe y tener a mis empleados siempre contentos, puedo ser un emprendedor, y ponerme a lanzar nuevos proyectos cada día que luego venderé a otros para que los continúen, o puedo también ser coach ;-), etc. Lo que soy no cambia, lo que hago si. Pero si hago algo en lo cual estoy expresando mi esencia mas profunda, no importa que tipo de empresa o actividad este realizando, siempre me sentiré satisfecho.

Escoger el canal mas adecuado para expresar lo que eres

Evidentemente aun sabiendo las 50 formas de expresar lo que somos no vamos a poder ponerlas todas en practica o no todas nos satisfarán por igual. De las posibles formas y profesiones que “lo que yo soy” puede tomar, habrá algunas que me resulten mas atractivas que otras por el resto de características que conforman mi personalidad. Quizás me da corte hablar en publico o no tengo las habilidades necesarias para ser un buen jefe, aunque pueda mantener a mis compañeros siempre motivados, por lo que esa manifestación profesional de lo que soy no será la mas adecuada.

Lo siguiente ya es obvio, una vez tengamos claro la esencia, hay que reducir la lista de posibles manifestaciones a dos o tres máximo, aquellas que cumplan el máximo de requisitos posibles. Y a partir de aquí establecer el cambio de profesión. Así que ya sabéis, cuando alguien os pregunte “¿y tu que haces?” no le digáis que sois coachs, decirles que “ayudáis a la gente a mejorar sus vidas”o que sois “motivadores natos”, yo por lo menos me encuentro mas a gusto en esa definición, ¿y vosotros? :-)

Fuente:

viernes, 28 de septiembre de 2012

7 consejos fáciles y eficaces para "Aprender a pensar en positivo"

Nunca es tarde para adoptar una visión más amable de nosotros mismos y del mundo que nos rodea porque hasta un 75% del optimismo de la persona depende de la actitud que tome. Si aprendemos a reprogramar nuestra mente, el más poderoso control de mandos de nuestra vida, conseguiremos pensar en positivo. Os dejamos algunas pautas para conseguirlo:

1. Implícate:
Invertir toda tu energía perseguir tus objetivos te ayudará a situarte la senda del éxito. Como dice la psicóloga Susan C. Vaugham: "El optimismo es como una profecía que se cumple por sí misma porque las personas optimistas presagian qué conseguirán o qué desean y la gente responde bien a su entusiasmo".

2. Sé insistente:
"Si no lo puedo hacer así buscaré otra forma de conseguirlo". Esta afirmación refleja uno de los aspectos en los que las personas que encaran la vida con positivismo sacan gran ventaja al resto: su capacidad para buscar alternativas o, lo que es lo mismo, para perseverar en el intento.

3. La fuerza está en ti:
Convierte el descontento por alguna situación que no te guste en el motor que impulse todos tus actos. "Las personas positivas confían en su poder para superar las barreras que se interponen en su camino". (Luis Rojas Marcos)

4. No más excusas:
Los lamentos actúan como cadenas que limitan sus movimientos. No debemos creer todo lo que pensamos, sólo con cuestionar los pensamientos negativos que circulan por nuestra mente conseguiremos verlo todo desde un punto de vista más favorable.

5. Espera siempre lo mejor:
Las personas positivas poseen una visión de la realidad que les permite tener ilusiones y entusiasmo y fuerza."Apostar por la esperanza ante la incertidumbre es tan natural en nuestra especie como caminar sobre dos patas". (Lionel Tiger, antropólogo)

6. Valora los detalles y los pequeños gestos:
En opinión de los expertos ser capaz de apreciar las pequeñas satisfacciones del día a día puede ayudarnos a ver el mundo con mejores ojos. Empieza desde hoy mismo a valorar cualquier recompensa que te de la vida: recibir un cumplido de una persona por la que sentimos una gran estima, escuchar una canción que trae buenos recuerdos, provocar la risa de nuestros amigos...

7. Aprecia las conquistas:
Las personas optimistas suelen atribuir sus éxitos a su propia competencia. Aunque la suerte y la ayuda de los demás haya sido de vital importancia, valora tus virtudes con orgullo y se el primero felicitarte.

Cuando tu la sonriés, la vida te devuelve esa sonrisa.

Fuente:
La Hospedería del Silencio


jueves, 27 de septiembre de 2012

Decreto para asumir el plan divino!!


El Plan Divino proyectado para mi vida se ejecuta AHORA, tengo un sitio que está destinado para mí y que nadie más puede utilizar, porque soy único , haré con Amor las cosas que sé hacer y que nadie más que yo puede hacer porque esa es mi esencia divina.

Hoy estoy totalmente preparado para el Plan Divino de mi vida, me encuentro equilibrado (a) para enfrentar cualquier situación.

Hoy, todas las puertas se abren frente a sorpresas agradables y bajo la gracia, el Plan Divino de mi vida se consume maravillosamente!!

Gracias Señor por tu amor infinito!!

Fuente:

Decreto para atraer la prosperidad!!


“Merezco todo lo mejor, no sólo un poco….TODO LO MEJOR. Merezco sentirme bien conmigo misma (o), me acepto tal y como soy. Tengo derecho a descansar y divertirme porque trabajo con responsabilidad para salir adelante cada día. Es mi derecho disfrutar la vida y de todo lo que bueno me ofrece. Me lo merezco. La vida quiere que yo este tranquila (o) y feliz, hoy dejo ir la tensión y el estrés.

La prosperidad del universo viene a mi sin esfuerzo porque soy para él y me lo merezco, Soy parte de Dios por eso todos me tratan con respeto, admiración y amor. Yo soy lo que pienso, así que elijo pensar en abundancia, prosperidad, cordialidad, amistad, armonía y felicidad.”

Gracias mi Dios porque Yo soy en ti para siempre…Amén.!!

Fuente:

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Yoga

Yoga, el siginificado de la palabra, los comienzos de la ciencia, las propiedades que otorga al ser humano, las mejoras que produce a nivel fisico, mental y espiritual, todo lo que necesitas saber sobre el Yoga.

Etimológicamente Yoga significa unión, ya que la meta del Yoga es la unión de la conciencia con el principio Absoluto.

El yoga es una ciencia empírica que purifica nuestro cuerpo y nuestra mente, liberándonos de todas las perturbaciones, una ciencia en donde ciertas personas han tratado de sondear los misterios de la mente, del intelecto, de las emociones, del sufrimiento y de la vida.

Yoga ha nacido no de la especulación, sino de miles de años de experiencias que han sido replicadas por muchos yoguis a lo largo de la historia.

Yoga posee sus propios métodos y fundamentos que hacen que sea un amplio y completo sistema de desarrollo interior.

Trabaja el cuerpo físico, las glándulas endocrinas, los órganos internos a la vez que busca conectar la mente inconsciente con la consciente y nos permite observar nuestros patrones mentales. La finalidad de esta disciplina es ayudarnos a mantenernos sanos, encontrar la felicidad tanto a nivel físico como a nivel mental y espiritual y que nos podamos sentir realizados.

Cualquier persona puede aproximarse al Yoga, ya que posee un tipo especial de técnica para cada tipo de personalidad y temperamento.

El yoga puede llegar a despertar en nosotros luminosos sentimientos y felicidad, los cuales fortalecen nuestras relaciones con nuestra esposa, los niños, padres, vecinos y compañeros de trabajo.

Así como el viento aleja las nubes que tapan el sol, el yoga remueve gradualmente los dolores físicos y emociones indeseables, pues, al revelar el conocimiento interior, incrementa nuestro aprecio por la vida.
El yoga nos enseña a controlar nuestros sentidos y nuestra mente impaciente, y a ponernos en armonía con las Leyes Universales, dirigiendo así nuestras energías de la mejor manera.

Tal como un instrumento musical emite sonidos muy agradables al ser tocado por un profesional, nuestro cuerpo, mente e inteligencia, dirigidos perfectamente, nos traen mucha felicidad, en vez de ansiedades, frustración y depresión.
La disciplina yógica nos enseña también a ver a los demás (amigos o enemigos) con los ojos del amor.

Una persona que practica yoga seriamente, se llama yogui. El yogui se ocupa diariamente del desarrollo práctico de la ciencia del yoga, y aprende los diferentes ejercicios y técnicas, tanto del yoga como de la meditación.

Una clase de yoga es una sucesión de ejercicios. Para realizar uno, adoptamos una postura. A veces a esta postura le incorporamos movimiento. Regulamos la respiración y ponemos la atención de los ojos en un punto determinado. Y entramos en un estado meditativo, de introspección. A veces incluso repetimos un mantra o hacemos un gesto con las manos. ¡Con tantas cosas que hay que controlar cómo no va a parar nuestra mente! Después de un ejercicio hay una corta relajación y seguidamente se pasa al siguiente.

El yoga beneficia a todo ser humano, no importa sea niño o persona mayor. Hombre o mujer. No importan las creencias personales.

Con el yoga estiramos nuestro cuerpo y, cuando más tenso y rígido está uno, es cuando más conviene. Rejuvenece nuestras células al aportarnos más oxigeno. También rejuvenece nuestro cerebro haciendo que su rendimiento sea más alto. Reduce el estrés al mantener los niveles de cortisol a raya. Nos calma y nos serena, permitiéndonos descansar. Nos da energía y vitalidad. Y nos acerca a nuestro ser interno, descubriendo quienes somos, qué queremos y dónde están nuestas limitaciones. Además, ¡segregamos endorfinas! que nos dan una gran sensación de bienestar. Pero de poco sirve hablar de los beneficios del yoga. A la consciencia no le sirven las palabras, quiere una experiencia. Descubre por ti mismo qué se siente al practicar yoga.

Fuente:

El mapa mental y la realidad

En Programación Neurolingüística se le llama “mapa” a la percepción individual y mental que tiene una persona del mundo. Este mapa mental se conforma a través de los filtros personales por los cuales cada uno va asimilando el mundo y la realidad. Me refiero a la educación, la cultura, las creencias, en fin, todas las experiencias y manera de observar que desarrolla una persona, así como de las percepciones y sentimientos de sus propias vivencias a través de sus propios filtros de la realidad. El mapa mental está determinado por la estructura genética y la historia personal. De ahí que es imposible que dos personas tengan exactamente la misma percepción ante un mismo hecho.

Muchas veces nos desesperamos, juzgamos, criticamos a los demás ya que “no entienden”, “no se dan cuenta”, “no les importa”, “no se preocupan”, “no se conducen como deberían”, “exageran las cosas”, “no les llama la atención”, “se desviven por tonterías”, “no es posible que hagan eso”, etc. Si nos damos cuenta, todas estas frases están basadas en juicios que elaboramos acerca de la conducta de los demás, en base a “mí mapa”, a lo que yo pienso, a lo que yo creo, y no me doy cuenta de que el otro actúa en base a lo que él piensa y a lo que él cree, que es totalmente diferente, es decir, respecto a “su mapa”.

Ninguna persona, inclusive mis hermanos, hijos, o padres van a ver y sentir lo mismo que yo, pues sus filtros del mundo son diferentes ante un mismo hecho. Todas las mentes piensan según su propio mapa y no del mapa del que tengo junto. Ante una misma realidad hay diferentes percepciones. Para demostrar esto les ofrezco un ejemplo muy sencillo. Si en un grupo yo propongo que todos piensen en un perro, uno pensará en un pastor alemán, otro quizá en un cocker, otro en un labrador, otro en un dálmata, otro en un salchicha, otro en un doberman, otro en un perro callejero, etc. ¿Por qué no pensaron en el mismo perro todos? Porque el que surgió en su mente, es con el que tienen o tuvieron una experiencia, es decir, es el que está en su mapa mental, en su vivencia. Simplemente en una familia, la opinión que los hijos tienen de un acontecimiento familiar, de su padre o de su madre o de tal hermano es diferente, pues el modo de vivirlo, sentirlo y relacionarse con él en ese momento varía de una persona a otra.

Por eso Programación Neurolingüística nos dice que “El Mapa no es el Territorio”, esto es, que el Territorio es la realidad escueta y completa, y el mapa es el modo personal de captarla. En el ejemplo del elefante se puede entender esto. Si en medio de un salón ponen un elefante, y para las personas sentadas alrededor es la primera vez que ven ese animal, las que están al frente dirán que un elefante es un animal alto con dos ojos, dos orejas enormes, una trompa, dos colmillos y dos patas. La personas que lo ven lateralmente no estarán de acuerdo, Ellas sostendrán que un elefante es un animal largo y grande, con una trompa, dos patas, pero que solo tiene una oreja, un ojo, un colmillo y una colita peluda atrás. Las personas que lo tiene por atrás, alegarán que un elefante es una cosa con dos ancas enormes, una colita peluda y dos patas, pero que ni es largo, ni tiene ojos, ni colmillos, ni orejas y mucho menos una trompa. Y si cada uno sostiene su punto de vista, nunca se podrán poner de acuerdo sobre lo que realmente es un elefante.

Éste es un ejemplo sencillo de cómo nosotros y la humanidad vamos por el mundo pensando que mi verdad es la absoluta, y no aceptamos la parte de la realidad del otro que nos falta. Esto nos lleva a divorcios, injusticias, egoísmos y hasta declaraciones de guerra. ¿Cómo hacer que el mundo árabe y el occidental lleguen a una sana convivencia, si no están dispuestos a ver el mapa del otro? ¿Cómo entender a un homicida, o a un ladrón, y en nuestra vida diaria al mentiroso, al egoísta, al chismoso, al perfeccionista, al metiche, al agresivo, al majadero, etc.?

Programación Neurongüística nos dice que cada quien actúa según su mapa mental, por lo tanto todas estas conductas son efecto de algo que las dispara. Son conductas aprendidas, creencias instaladas, modos y estilos de vida vivenciados diferente, y siempre hay una razón interna para proceder, pensar, y sentir ante la realidad que no va a ser igual que a nadie.

Así que el mundo interno es la obra de su autor y cada “universo” es único y personal, o sea, cada persona tiene su propio e individual mapa mental del mundo y hay una indiscutible diferencia entre la realidad y la experiencia que el organismo tiene de ella. Los seres humanos construimos nuestros modelos mentales del mundo, el mapa con el cual vamos a transitar por él a través de programas neuro-lingüísticos. Lo único que nos conforma son nuestras vivencias. PNL nos dice que ningún mapa individual del mundo es más real o verdadero que otro. Y el objeto de PNL es el de permitir a cada persona adquirir un modelo del mundo que le sirva para obtener lo que es importante en su vida. Cuantas más rutas u opciones ofrezca nuestro mapa, más oportunidades tendremos de conseguir nuestros objetivos y esto sólo se logrará a través del arte del cuestionamiento interno y la aceptación de los demás.

Así que antes de enjuiciar, enojarnos, deprimirnos ante la conducta ajena, pensemos que el otro tiene un mapa diferente al mío y según éste, él actúa. Vayamos dándole la vuelta al elefante para ampliar nuestro mapa del mundo, para ampliar nuestra mente, ya que la mejor manera de aprender es a través del conocimiento del otro y esto sólo se logra con una buena comunicación. Yo estoy bien, pero el otro también. Cada uno responde a su propio mapa mental. Yo me enriquezco y amplío mi mapa a través del otro. Voy a averiguar y aprender de las diferencias, así crearemos más opciones y aprenderemos a respetar a los demás.

Así, cada uno de nosotros va construyendo, más o menos conscientemente, su propio mapa de la realidad y a éste acudimos cuando el entorno en el que nos movemos demanda una acción o algún tipo de respuesta de nuestra parte. Pero un mapa no es la realidad, como un retrato no es la persona que representa en sí, es solo una imagen de ella.

Los mapas se pueden completar con nuevos datos, se pueden corregir generando opciones nuevas, se pueden abrir a nuevas posibilidades más enriquecedoras de interpretar e interactuar con el mundo real. Esto terminará con el estrés, los corajes, los enojos, etc. y redundará en una mejor salud ya que aprenderemos a ser flexibles y a no crear falsas expectativas.

Fuente:


martes, 25 de septiembre de 2012

¿Qué es el Reiki Usui?



¿Qué es el Reiki Usui japonés?

El Reiki Usui es una terapia energética donde, a través de la imposición de manos, se busca un equilibrio en los diferentes planos (físico, emocional y espiritual)

Reiki es una técnica sencilla pero de gran eficacia, y se puede recibir a través de un terapeuta o también auto tratarse, siempre y cuando se haya sido iniciado y formado por un maestro. Reiki es una de las pocas técnicas existentes hoy en día que se transmite Maestro-Alumno.

¿En qué se basa el Reiki Usui?

A través de la imposición de manos se canaliza la energía universal para transmitirla al paciente. Con ello lo que se consigue es subir el nivel vibracional de la persona y así expulsar las energías negativas o de más baja vibración que hay en el cuerpo. De este modo se sienten los efectos en la mejora de salud y bienestar en general.

¿En qué nos puede ayudar?

Actualmente se ha comprobado la efectividad del Reiki Usui en la mejora o sanación de un gran número de dolencias. A continuación detallaremos algunas de las más comunes y en las que los efectos se sienten de forma más rápida:

  • Incrementa y potencia nuestra energía. 
  • Es de gran ayuda en los estados de estrés, aportando calma en los momentos más tensos. 
  • Libera las emociones reprimidas y bloqueos energéticos. 
  • Incrementa la autoestima y confianza. 
  • Es perfecto para las personas que sufren estrés o ansiedad. 
  • El Reiki Usui estimula el sistema inmunológico. 
  • Es de gran ayuda a las personas con cáncer para contrarrestar los efectos de la quimioterapia 
  • Aumenta la creatividad y la imaginación. 
  • Alivia dolores de cabeza, catarros, fatigas ó quemaduras.
Además de ser de gran ayuda en temas relacionados con la salud, el Reiki Usui también es una gran herramienta para el crecimiento personal y espiritual. A través de la práctica constante se pueden llegar a un estado de plenitud, donde la actividad más sencilla se convierte en un gozo y placer total. Se consigue una conexión plena y total con la naturaleza y todos los seres vivos.
Origen e historia del Reiki Usui

Los orígenes del Reiki se remontan a varios miles de años, donde se tiene constancia, que ya nuestros ancestros utilizaban las manos para curar. No obstante, es a principios del siglo XX cuando el Dr. Mikao Usui moderniza esta técnica y nos obsequia con un sistema, que utilizado de la forma en que él nos indica, aporta grandes beneficios a la salud.

Además puede llevarnos al estado de "satori" (iluminación), que era uno de los objetivos principales del Dr. Usui. Años más tarde, y después de su fallecimiento, Reiki Usui llegó a occidente a través de la Maestra Takata, quién efectuó algunos cambios y lo adaptó a las necesidades que ella creyó oportunas. Luego salieron más ramificaciones y tipologías, como el Reiki Usui tibetano o el tibetano-tántrico.


Diferencias entre el Reiki Usui tradicional japonés y otras clases de Reiki

El Reiki Usui tradicional Japonés es el que viene directo de Usui sin apenas cambios en las enseñanzas que él dio en su día. El Reiki Usui tradicional japonés consta, además, de más de 30 técnicas de sanación que sirven de ayuda para uno mismo y para los demás.

En los diferentes tipos de Reiki podremos encontrar cambios en los niveles a cursar así como en los símbolos entregados de Maestro a Alumno.

Javier Robas
Maestro y terapeuta de Reiki Usui Tradicional Japonés

Acéptate


Acéptate eres, y esa es una de las cosas más difíciles del mundo, porque va contra tu entrenamiento, educación, tu cultura.

Desde el inicio te fueron diciendo como tenias que ser, nadie nunca te dijo que tu eras bueno como tu eres. No seas obsesionado contigo mismo, pero un amor propio natural es imprescindible, es una condición básica por la cual puedes entonces amar a otros.

Acéptate a ti mismo, ámate a ti mismo. Ninguna otra persona ha sido jamás como tu y nadie más será como tu. Tu eres simplemente único, incomparable: acepta esto, ama esto, celebra esto, y en esa misma celebracion comenzaras a ver la singularidad de los demás, la incomparable belleza de los otros. El amor es solo posible cuando hay una profunda aceptación de uno mismo, del otro, del mundo. Aceptar es el elemento clave en el cual crece el amor, en el cual florece el amor.


Osho

lunes, 24 de septiembre de 2012

El afecto como complemento en las relaciones humanas


El sentimiento de afecto es algo intrínseco, que se manifiesta en circunstancias emanadas de compañerismo, de vivencias comunes de lo cotidiano, desarrollando un ambiente familiar en quienes lo perciben.

En Atenas existen más de 100 museos, no se puede esperar menos de un país con tanta historia, sin embargo uno de los museos que más me llama la atención no es precisamente uno de ellos sino el museo de las palabras olvidadas.

La palabra afecto es una de las pocas usadas en la actualidad especialmente por la juventud, a pesar de que este concepto existe desde los tiempo antiguos, los griegos lo expresaban como Storge. Que se define como afecto especialmente entre los padres hacia su prole, y también de la prole hacia sus padres.

Al afecto se le conoce como el menos discriminativo de los amores.

Relaciones humanas

Muchas veces no existe una explicación racional que lo conciba; es discreto e ignora todo tipo de obstáculos, en el ámbito de las relaciones humanas se concibe a través de un concepto familiar, de estimación por alguien por el cual lo unen ciertas experiencias cotidianas del diario vivir, como por ejemplo la relación de un directivo importante con su niñera o con su jardinero, al que saluda todos los días.

No hace falta que exista algo extremadamente precioso meritorio o valioso entre lo que comparten el afecto. Pero lo curioso del afecto, es que tiene pocas reglas fijas, pero una básicamente fundamental como dice Carl Lewis en su libro “Los cuatro amores”: el objeto del afecto debe ser familiar


Una verdadera convivencia

El sentimiento de afecto es algo intrínseco, que se manifiesta en circunstancias emanadas de compañerismo, de vivencias comunes de lo cotidiano, desarrollando un ambiente familiar en quienes lo perciben. Por eso los griegos lo relacionaban en su plenitud con la convivencia entre padre e hijos, donde se da dicho sentimiento con cariño que es y será la base del nacimiento de una verdadera amistad entre ellos, esa atadura, esa unión se debe al afecto que se tiene por el simple hecho del parentesco.

Amistad entre padre e hijo

En el ámbito del afecto existe una sutil pero sustancial distinción: es diferente del padre al hijo que del hijo al padre. El padre quiere a su hijo, se desvive por él solamente por que sí, no hay explicación, es un sentimiento que existe innegablemente. Por su parte el hijo va sintiendo emociones y afecto que irán variando a lo largo de los años. No existe amor y entrega más ilógicos y desinteresados que la de un padre hacia su hijo. Existe algo que se fusiona entre ambos, que los consolida por el simple hecho de estar emparentados. Esa familiaridad incluso por la forma parecida de conversar, similitudes en el físico, expresiones semejantes, crean afinidades, simpatía, cariños entrañables a pesar de un posible distanciamiento de criterios.

La importancia del ejemplo

Joseph Joubert, moralista y ensayista francés, con respecto a este tema señalando la importancia de la relación entre padre e hijo a través del afecto afirmó en una oportunidad “Los niños necesitan más modelos que críticos” Frecuentemente los niños, en lugar de obedecer a lo que se les dice, tienden a copiar o imitar a los que les rodean.


La palabra afecto hoy pareciera que sólo se encuentra en el museo de las palabras olvidadas, pero depende de cada uno de nosotros sacarlas del léxico de antigüedades y mostrar su significado a la juventud a través de ejemplos prácticos, que demuestren con hechos su verdadero sentido, que complemente la formación de los hijos en un constante desarrollo hacia sentimientos que sólo saben emerger en el círculo familiar, como un vínculo influyente para descubrir la amistad entre padres e hijos con cariño, estima, y aprecio.

Fuente:
http://www.blog.alexponce.com

domingo, 23 de septiembre de 2012

Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva

IV. RENOVACIÓN

4.1.- SÉPTIMO HÁBITO: AFILE LA SIERRA.-

El séptimo hábito es el de renovación personal. Tiene que ver con renovar las 4 dimensiones de las cuales se compone el ser humano: Física, Emocional / Social, Espiritual y Mental.

  • La dimensión física: Supone cuidar nuestra integridad física buena alimentación, descanso adecuado y ejercicios de manera habitual son las bases para una buena salud. En este sentido el ejercicio tiene una acción doble porque adema de fortalecer nuestro cuerpo desarrolla nuestro sentido de la voluntad para practicarlo.
  • Renovación Espiritual: Nuestro espíritu es el centro de nuestros valores, por lo que este aspecto es tan importante como el físico. La renovación espiritual se consigue por medio de todo aquello nos reúne con nuestros mas íntimos y mejores valores.
  • Renovación Mental: La renovación mental trata del enriquecimiento de nuestro intelecto y esto se puede conseguir de diferentes maneras: leyendo, escribiendo, planificando, etc.
  • La dimensión social / emocional: La socialización es otro de los aspectos importantes de la renovación y esta íntimamente ligado a los valores y principios con los que tratamos para poder hacerlo.
Para que se logre el equilibrio que se persigue con la renovación es necesario que los 4 aspectos se aborden de manera simultanea, ya que al estar interrelacionados la renovación es un proceso continuo que consta de aprendizaje, compromiso y acción para el que no hay atajos.


Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva



III. VICTORIA PÚBLICA

En este capitulo se trata los 3 hábitos que influencian de manera directa en la interrelación exitosa que podemos lograr con nuestro medio y el resto de las personas. Esto solo es posible una vez que se logra afianzar los 3 primeros hábitos que son los que sirven de base a los 3 siguientes. Los 3 hábitos de los que trata la victoria pública tiene en elemento común el cual es la confianza que podemos generar en los demás ó como mayormente se le nombra “La cuenta bancaria emocional”.

Pero nadie va a confiar en nosotros sino damos las condiciones necesarias para que esto suceda. Como su nombre lo indica la cuenta bancaria emocional es similar a la cuenta de ahorros en un banco. Es necesario realizar depósitos constantes para que se pueda exigir créditos. Los mas importante es que estos depósitos deben ser percibidos como auténticos por la persona que los recibe ó en lugar de producir una aumento en la confianza generada se transformara en una disminución. Para esto se puede realizar depósitos en 7 aspectos principales:
  • Comprender al individuo: Tratar de comprenderlos tanto como quisiéramos ser comprendidos nosotros y tratar a la gente en términos de esa comprensión.
  • Prestar atención a las pequeñas cosas: Los pequeños detalles que muchas veces pueden ser pasados por alto ó no advertidos por nosotros pueden marcar la diferencia en una relación interpersonal.
  • Mantener los compromisos: No prometa nada que no pueda cumplir ya que esto supondrá una disminución en el grado de confianza.
  • Aclarar las expectativas: Lo más recomendable es poner las cartas sobre la mesa. No asumir que hay cosas que se sobrentienden.
  • Demostrar integridad personal: Emite la hipocresía y la duplicidad interior. A ser percibidas que pueden terminar cerrándonos cualquier posibilidad de interacción y confianza con las personas.
  • Disculparse sinceramente cuando se realiza un reintegro: Si se equivoca, discúlpese de manera sincera. Este simple acto de humildad, si es sincero puede significar un gran depósito de confianza en la otra persona.
  • Las leyes del amor y las leyes de la vida: Haga las cosas de manera desinteresada y siguiendo solo lo que sus principios le indican. En caso contrario provocara resistencia a la apertura.Debemos recordar que cada problema puede convertirse en la oportunidad de poder ayudar a alguien más y realizar un importante depósito en su cuenta emocional.

3.1. CUARTO HÁBITO: PENSAR EN GANAR / GANAR.-

El cuarto hábito “pensar en ganar/ ganar”, es el síntesis de la interacción humana afectiva. Dentro de los paradigmas de la interacción humana podemos reconocer 6 tipos:

  • Ganar / ganar: Es beneficio es para todos, se busca la solución en la cual todos salgan beneficiados. Este tipo de pensamiento busca la satisfacción de todas las partes en el acuerdo que se tome, con lo que se consigue también la cooperación efectiva y el compromiso de todas en el plan de acción.
  • Gano/ pierdes: Uno obtiene beneficio a costa de otro ó termina beneficiado de manera preferente con relación a alguien más. También se realiza al momento de realizar comparaciones entre los logros de 2 personas.
  • Pierdo/ ganas: Una de las partes cede totalmente falta de voluntad propia y abdica a todas las imposiciones de la otra parte. Generalmente esta acompañada de una baja autoestima.
  • Pierdo/ pierdes: Se asocia al conflicto, lo mas importante es derrotar al que se considera el rival, lo que provoca opresión mutua y cierra la puerta a cualquier acuerdo.
  • Gano: No existe confrontación, solo interesa lograr el objetivo.
  • Pierdo: No se logra el objetivo.La utilización de alguno de estos 6 parámetros depende de la situación a las que nos enfrentamos, pero como mayormente nuestro medio requiere relaciones interpersonales, la filosofía ganar / ganar es la que mejores resultados brinda. Pero eso no significa que siempre se llegue a un acuerdo con este paradigma. Hay ocasiones en que no hay posibilidad de acuerdo y se debe recurrir a una forma alternativa de ganar/ ganar o no hay trato con los que emitamos el conflicto que se pueda crear expectativas insatisfechas.
La filosofía ganar/ ganar implica 5 diferencias interdependientes en la vida:
  • Carácter: Que implica aspectos como la integridad, madurez y la mentalidad de la abundancia, que no es otra cosa que el paradigma de que en el mundo hay suficiente para todos.
  • Relaciones: La base de la filosofía ganar/ ganar son las buenas relaciones y esto solo se logra si el nivel de confianza entre los participantes es alto.
  • Acuerdos: Se deben establecer claramente los parámetros en los que se desarrolla la relación ganar/ ganar.
  • Sistemas: Para que funcione el acuerdo, debe situarse dentro de un sistema que de las condiciones para su realización además de estar alineado con el objetivo.
  • Procesos: Para que la filosofía ganar/ ganar funcione, es necesario que el proceso que llene a el también este orientado en ganar/ ganar
3.2.- QUINTO HÁBITO: PRODUCE PRIMERO COMPRENDER Y DESPUES DESCOMPRENDER.-

La filosofía de este quinto hábito tiene su centro en la comunicación empatica, es decir en la capacidad que tenemos de comprender el paradigma que maneja la otra parte antes de que podamos emitir una opinión. Es mejor primero escuchar antes de emitir un principio de acuerdo a nuestro propio paradigma porque podríamos cerrar la puerta a información importante.

Para esto se debe escuchar con autenticidad, ya que la menor señal de dobles puede cortar el flujo de comunicación. El alma de la comunicación empatica esta en la necesidad de comprender lo que piensa y siente la otra persona. En otros términos “ponerse en los zapatos”. Es muy importante también tener seguridad que se ha comprendido bien lo que se nos ha comunicado antes de poder dar nuestra opinión. Muchas veces caemos en la tentación de interpretar lo que se nos dice a través de nuestras experiencias personales y no vemos más allá de nuestro propio paradigma.

Al intentar comprender, aumentarnos la confianza que tienen en nosotros y abrirnos la puerta para que los demás puedan comprender. Esto es un proceso que puede tomar tiempo y lo mejor es tratar que se desarrolle a su propio ritmo, pero los resultados pueden ser muy beneficiosos pues podemos aumentar nuestro círculo de influencia.



3.3.- SEXTO HABITO: SWERGTCC.-

En el sexto habito la carta en la sinergia. Sinergia (es la complementación de las partes de un todo para el logro de los mejores resultados). Es la interrelación afectiva que podemos tener con otras personas en la concepción de objetivos. En otras palabras trabajo en equipo.

Para que pueda producir esta sinergia dentro de un equipo de trabajo, organización, familia, grupo social, etc., es necesario que la comunicación que se realiza dentro del grupo sea sinérgica ya ella abre oportunidades para que el potencial de cada uno de los miembros del grupo pueda ser explotado a plenitud. Uno de los requisitos más importantes de la comunicación sinérgica es la autenticidad, ya que permite al resto de personas relacionarse de manera efectiva con lo que se dice y hace suya la idea relacionada con sus propias experiencias.

Debemos tener en cuenta que cada experiencia de sinérgica es única y particular, por lo que es inútil querer reproducirla. En todo caso en lugar de querer imitar unas experiencias pasadas lo ideal es centrarse en el objetivo que se persigue. Este unido a un nivel de confianza alto (una buena cuenta bancaria emocional) puede producir resultados que sobrepasen las expectativas planeadas.

La comunicación sinérgica nos permite hallar un punto medio cuando es difícil hallar una solución entre 2 puntos de vista. Esto emite la perdida de tiempo y energía que se produce en muchas ocasiones, cuando nos encontramos en posiciones extremas ya sea porque imponemos nuestra opinión ó porque nos sometemos a la de algún otro. Para poder lograr sinergia hay que ser consiente que existe más de un punto de vista ó paradigma. Además hay que estar dispuestos a escuchar lo que la otra persona tiene que decir.

En otras palabras sinergia puede definirse como cooperación armónica y es lo ideal para la efectividad interdependiente porque busca una tercera salida a 2 posiciones opuestas.


Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva


II. VICTORIA PRIVADA

Este segundo capitulo empieza con un enfoque de lo que se denomina “Victoria Privada”, que son los logros que se deben conseguir antes de poder interactuar de manera eficiente con el medio.

Muchas veces se dice que somos un reflejo de nuestro entorno y esto no deja de tener razón, ya que muchas veces lo que dicen ó esperan los demás de nosotros condiciona lo que somos y los paradigmas que tenemos de la realidad. Para poder modificar esto podemos decidir de que manera podemos reaccionar (en nuestro interior) a los sucesos que ocurren en el exterior y modificar la manera que esto nos afecta. Esto es posible por medio de la autoconciencia a través de ella tomamos contacto con el hecho que somos capaces de decidir la influencia que tendrá un suceso sobre nosotros, la imaginación (que en nuestra capacidad creadora y nos permite crear situaciones nuevas, mas allá de la realidad), la conciencia moral (que nos indica lo correcto y lo incorrecto y si lo que hacemos esta en armonía con nuestros principios) y la voluntad independiente (por la cual estamos en la capacidad de actuar en base a nuestra autoconciencia).

2.1.- PRIMER HÁBITO. SEA PROACTIVO.-

Al reunir todos estos elementos desarrollaremos el primero de los hábitos de la gente altamente efectiva, la pro actividad, aunque mucha se asocia con tomar la iniciativa, es mas bien la responsabilidad de hacer que las cosas ocurran, no por impulso externos sino por conducción y principios. En otras palabras es la respuesta que damos desde lo mas profundo de nuestras conducciones a todos aquellos hechos que están fuera de nuestro control. Esto es totalmente lo opuesto a ser reactivos, es decir a dejar que las condicione de nuestro medio nos controle o bien responder influido por criterios que nos emanan de nuestros principios. Al ser proactivos actuamos sobre las circunstancias y las condiciones de otros que actúan sobre nosotros.

Dentro de las condiciones que nos rodean hay eventos sobre los que podemos influir (Circulo de influencia) y eventos que están fuera de nuestro control (Circulo de preocupación). Siendo proactivos potenciamos nuestra capacidad para incidir sobre eventos sobre las que no tenemos control y auto montamos nuestro círculo de la influencia. Pero para que esto funcione es necesario un alto grado de compromiso para poder actuar de acuerdo a los principios y paradigmas que nos hemos establecido.

2.2.- SEGUNDO HÁBITO: EMPIECE CON UN FIN EN MENTE

El segundo hábito trata principalmente de fijarse metas de lo que le gustaría lograr, pero no cualquier clase de metas. Lo importante de esto es trazarse metas que estén de acuerdo con los paradigmas y principios que manejamos. Como en el ejemplo del funeral que es mencionado para graficar el segundo hábito, es la forma en que quisiéramos ser recordados por todos aquellos que nos conocen y que pueden mencionar todo aquello que hemos logrado en la vida.

Para que esto suceda tenemos que tener en cuenta que este hábito se basa en el principio que “todas las cosas se crean dos veces”. La primera creación es mental, mientras que la segunda es física. Mientras mejor planifiquemos y tengamos una idea clara de cual es nuestro objetivo mayores serán nuestras opciones de llevarlos a cabo. Debemos tener claro que ser los creadores, ósea ampliar el primer hábito por que de lo contrario las condiciones y el medio decidirán por nosotros.

El segundo hábito nos da la oportunidad de poder rescribir el quien de nuestras vidas por medio de la imaginación y la conciencia moral, ya que a través de ellas podemos corregir en nuestra mente la visión del mundo y las metas que tenemos de adecuarlas a los principios que manejamos. Es como corregir el mundo de un basco luego de haber reparado el timón.

Para ello, un de los métodos mas eficaces es resumir todas nuestras metas en un enunciado de misión personal, el cual debe de estar basado en lo que uno quiere ser y lograr los valores y principios que sirvan de base a nuestro ser y accionar. Este enunciado de misión personal debe basarse en nuestros paradigmas básicos que sirven de sustento a nuestro carácter y debe de considerarse una fuente de constitución personal que rifa todo nuestro accionar y nos sirve de guía en cada decisión que tomamos.

Para que este enunciado de la misión personal funcione debemos recurrir a nuestro centro de influencia, el cual al estar basado en principios nos permite elegir con verdadera libertad las mejores alternativas de solución para cualquier situación. Al redactarse debe estar en función a los roles mas importantes en nuestra vida, además de ser equilibrado y no crear conflictos entre esos roles. También debe ser con metas a largo plazo.

2.3.- TERCER HÁBITO.- ESTABLEZCA PRIMERO LO PRIMERO.-

El tercer hábito trata de la concreción del primer y segundo hábito. Es decir la segunda creación física. Mediante este tercer hábito damos el paso adelantado para la realización de las metas que nos hemos propuesto con el segundo hábito. Es el ejercicio de la voluntad independiente de la cual la que nos permite cambiar es quien ineficiente que hemos seguido hasta este momento sustituirlo por un nuevo basado en nuestros mas profundos y enraizados principios.

Establezca primero lo primero nos da como referencia administración de tiempo y actividades que consumen generalmente nuestro tiempo podemos dividirlas en 4 bloques: Urgente e importante, Urgente y no importante, No urgente e importante y No urgente y no importante. De ellas Urgente e importante es el área de mayor tensión y stress ya que ahí se produce la crisis, los problemas apremiantes y los proyectos con fecha de vencimiento próximo.Urgente y no importante reúne aquellas que si bien reclaman una atención inmediata no tienen trascendencia ni gran influencia. No urgente e importante reúne aquellas actividades que no requieren atención inmediata pero sin embargo su atención atrae grandes beneficios y tiene influencia sobre eventos futuros. Por ultimo No urgente y no importanteaborda actividades que generalmente hacemos en nuestro tiempo libre actividades agradables, cortas, trivialidades, etc.

Para poder establecer primero lo primero debemos conocer la diferencia entre cada uno de ellos y los beneficios que nos aporta. Mientras Urgente e importante consume gran parte de nuestro tiempo, generalmente los resultados que se obtiene de el son a corto plazo y d poca trascendencia. Urgente y no importante y no Urgente y no importante no reportan ningún beneficio ni trascendencia. El corazón del tercer hábito se encuentra en No urgente e importante ya su influencia trae grandes beneficios como el establecimiento de relaciones, reconocimiento de nuevas oportunidades e incluso sin influencia puede trasladarse a Urgente e importante por medio de la prevención y la planificación, lo que ayudaría reducir el numero de actividades en urgente e importante.

Para ayudar en la organización de las actividades no urgentes e importantes se puede contar con la ayuda de un organizador que satisfaga algunos criterios básicos como: Coherencia, equilibrio, ser portátil, etc.

El atender a actividades no urgentes e importantes no implica que lo hagamos todo nosotros también se puede delegar actividades que por su naturaleza lo permitan, definiendo el marco en el que serán desarrollados e indicando a la persona asignada que tendrá libertad de acción para realizar el trabajo dentro de los limites establecidos, con lo que se puede evitar el trabajo de una supervisión constante y transmitirá confianza a la persona que lleva a cabo la tarea. Para el resto de actividades podemos programarnos a largo plazo, proyectándonos desde el enunciado de la misión hasta la meta que se quiere lograr y a corto plazo (por ejemplo una semana) desde los roles que desempeñamos hasta el cumplimiento de los planes trazados para dichos roles.



Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva

Este es un libro cuya finalidad es la de darnos las herramientas para lograr una interrelación productiva con nuestro medio y nuestros semejantes, bajo el concepto de los cambios de paradigma ó formas de ver la realidad interrelación productiva ó efectiva es un proceso dividido en 7 pasos ó hábitos los cuales son debidamente explicados y que van desde una transformación paulatina del yo interior hasta la influencia que esta transformación puede ejercer sobre nuestro medio y nuestras relaciones con nuestros semejantes, pues como seres sociales que somos, necesitamos mantener relaciones de interdependencia con todos y lo que se pretende es que estas sean lo mas productivas posibles.

Como se señala inicialmente los 7 hábitos son todo un proceso interrelacionados y que va desde el interior hasta la influencia que esto puede ejercer sobre nuestro medio.

I. PRINCIPIOS Y PARADIGMAS

En este primer capitulo se aborda el tema de los principios y los paradigmas y la forma como este puede afectar la manera de ser con problema y la solución que le damos.

Se entiende por paradigma la percepción que tenemos de la realidad, el modelo o concepto que tenemos de determinadas situaciones ó casos. Esta percepción hace que ante determinadas situaciones reaccionemos de una manera determinada. Muchas de ellas nos han sido inculcadas desde niños, tanto por la familia como por la educación tradicional y por nuestro medio. Pero están realmente basados en valores y principios auténticos, realmente creemos en estos principios y representan nuestros más profundos valores.

Para hallar una respuesta a ello debemos de analizar si nuestros principios se basan en la ética de la personalidad ó del carácter. Ellas se diferencian entre si sustancialmente porque mientras la ética de la personalidad se basa en una serie de técnicas, habilidades, actitudes y conductas que trabajan mayormente solo la actitud mental y en ocasiones resultaban manipuladoras, la ética del carácter basa su fuerza en principios que si bien no son nuevas, tienen transcendencias a través del tiempo y que son inamovibles como la integridad, el valor, el amor, etc. y que nos puede dar la seguridad de tomar las decisiones correctas, a si como tener una perspectiva clara de las cosas.

Lo importante de los paradigmas es que nos permite percibir que hay mas de un punto de vista en las percepciones de la realidad y que no necesariamente hay un punto correcto y uno errado. Muchas veces un paradigma refleja la idea que tenemos de la realidad y esta basada en experiencias propias. Esto puede provocar que tengamos una visión limitada de la realidad, mas aun si no esta basada en principios elementales de condición humana.

Para poder realizar un cambio de paradigma ante todo se debe iniciar analizando cuales son los principios que manejamos y si estos están acorde con los paradigmas que tenemos. Al basarnos en principios correctos y basar nuestros paradigma en ellos mejoramos aquellos aspectos en los que tenemos déficit y conseguimos soluciones a largo plazo con lo que se consigue un cambio de adentro hacia fuera. Para que se produzca este cambio es necesario tener en cuenta los 3 aspectos de los cuales se compone un hábito. Conocimiento, capacidad y deseo.

El conocimiento es el paradigma teórico, el que hacer y para que. La capacidad nos indica el como hacer mientras que el deseo es la motivación, el querer hacer. Para que existan en hábitos es necesaria la existencia de estos 3 componentes.

Los 7 hábitos buscan ante todo potenciar el sentido dirección de las personas para que logre, la resolución de problemas con una efectividad máxima. Para esto se busca el equilibrio entre lo que requiere lograr y los medios con los que contamos para conseguir el objetivo (P/CP). Por ello la efectividad y el equilibrio P/CP son aplicables para cualquier objetivo que se quiera lograr físico, económico ó humano.


jueves, 20 de septiembre de 2012

PNL y la depresión adolescente

La época de la adolescencia, generalmente va aunada a una baja autoestima cuando el adolescente no ha podido descubrir quién es y para qué vivir la vida.

Para llegar a contestar esta pregunta tendrá que darse cuenta de quién es y de que tiene una misión importante en esta vida. Esto no es fácil ya que el adolescente es muy influenciable, sobretodo por otros adolescentes que están viviendo lo mismo que él, pero que aparentan ser los que saben de todo y se convierten en líderes de los que los rodean.

De aquí surgen las pandillas, los grupos de amigos que salen juntos y tienen las mismas actividades, generalmente del mismo sexo. El formar parte del grupo es esencial para el adolescente, ya que “el mundo no los entiende” y menos su familia.

El adolescente tiene que probar y experimentar cosas nuevas que la vida le va ofreciendo y que no siempre son ecológicas como el fumar, beber, parrandear, etc. Esto es parte de su crecimiento y de afirmarse como persona. Es una época difícil para él y para los que lo rodean. Los cambios hormonales que sufre durante ésta época hace que él mismo no se entienda. A veces está de buenas y sin saber por qué se pone de malas. Así como sus estados emocionales no están balanceados, su cuerpo tampoco lo está. Hay compañeros de su misma edad que crecen más rápido o más lento que él. Es una época de muchas preguntas para él, y aquí es cuando el adolescente puede caer en una baja autoestsima al no tener respuestas favorables, debido muchas veces, a la inestabilidad emocional en la que vive. Puede incluso tener conductas autodestructivas si de alguna manera no puede llegar a una autovaloración en un tiempo considerable.

Un ejemplo de este caso es el de una chica que llegó a mi consultorio con el problema de baja autoestima y que se hacía cortes con una navaja en brazos y muñecas cada vez que alguien la rechazaba, o se sentía culpable o víctima de algo que había pasado. Siempre andaba con playera de manga larga o sweater que nunca se quitaba, ya que su familia y amigos ignoraban lo que hacía con su cuerpo.

Después de 2 sesiones de escucharla básicamente y de cuestionarla con sus mismas palabras lo que me decía seguido de un ¿“para qué” lo hiciste? ¿“Para qué” te sirve? Ella se fue dando cuenta de las consecuencias de su actitud y de su falta de seguridad en sí misma. Simplemente no se conocía.

La fui guiando a que se diera cuenta de todos los logros que había tenido en su vida, y lo feliz que la habían hecho, para esto era necesario que volviera a revivir la sensación de seguridad que había perdido.

Hicimos el siguiente ejercicio como base para su terapia desde la tercera sesión y que se volvió un nuevo programa en su mente que la pudo ir sacando de ese estado de autodestrucción en el que había caído.


  1. Piensa en un momento de tu vida en el que hayas logrado algo que tenías muchas ganas de lograr.
  2. Ahora cierra tus ojos y piensa en ese momento en que lo logras. ¿Qué edad tienes? ¿Dónde te encuentras? ¿Qué te dices o piensas de ti en ese momento? ¿Qué sientes al haberlo logrado? Respira profundamente.
  3. Quiero que me digas ¿a qué se parece esta sensación de seguridad que tienes en este momento? Si te dijera que dibujaras esta sensación, ¿qué dibujarías? Ella contestó que dibujaría una carita feliz.
  4. Ahora piensa que esta carita feliz es el símbolo de tu seguridad. Respirando profundamente, piensa en esta carita feliz y con tus manos llévala a tu pecho integrándola a ti.
  5. Date cuenta qué se siente tener una carita feliz en ti que es el símbolo de tu seguridad y que puedes evocar cada vez que la necesites con sólo tocarte tu pecho y respirando profundamente.
  6. Acuérdate de ella. Sobretodo antes de dormirte y al levantarte repitiendo “mi carita feliz vive en mí”. Respira profundo y abre tus ojos.
Durante las siguientes tres sesiones, al iniciar cada sesión le pedía que se acordara de otra situación en la que había logrado lo que había querido y que había sido bueno para ella y para los que la rodeaban y repasábamos los 6 pasos anteriores. Esto ayudó para que se diera cuenta de qué clase de persona era elevando su autoestima.

Después de instalar la seguridad en ella a través de su símbolo, manejamos la visualización de su camino en la vida hacia futuro, haciendo que cerrara sus ojos y visualizara un camino en frente de ella en el cual su carita feliz caminaba siempre hacia delante. A los lados del camino colocó, de un lado a todos sus amigos y del otro a su familia. De esta manera ella cayó en cuenta de que la única responsable de su vida era ella, siempre con su carita feliz que le ayudaba a dar los pasos necesarios hacia adelante, y que sus seres queridos ahí estaban con ella acompañándola, pero su camino siempre tenía que estar despejado.

Al elaborar esta nueva programación en su mente, ella fue capaz de empezar a quererse nuevamente. Bajó de peso, dejó de lastimarse, y empezó a tener relaciones más sanas.

Con esta programación instalada se pudieron manejar otras situaciones que la tenían conflictuada.


Fuente:
http://www.estrategiaspnl.com


lunes, 17 de septiembre de 2012

La solitud

Antes de hablar de la solitud, me gustaría hablar de la soledad. Este término la mayoría de las veces nos aterroriza, pues implica el no tener a nadie a nuestro alrededor, significa el abandono de los seres queridos, la pérdida física de los tuyos, el que no le importes a nadie, no tener con quién compartir, el sentirse desvalido e indefenso ante el mundo, etc.

Todo lo anterior trae consigo sentimientos de tristeza, de desilusión, de inseguridad, de depresión, de enojo en contra del mundo que nos rodea, etc. Se pierde el significado de la vida muchas veces, cuando nos llega a pasar. ¿Para qué vivir? Hay una pérdida de identidad en nosotros ya que el mundo exterior no nos responde, sino que nos abandona, convirtiéndonos en víctimas en este valle de lágrimas.

Esta soledad puede ser fatal para muchos. La persona se enferma, se debilita, se marchita y si no muere físicamente, está muerta espiritualmente. Pierde el rumbo y el significado de su vida y de su misión.

La persona que sufre este tipo de pensamientos “ya no le intereso a nadie”, ”ya no tengo nada que hacer”, “no hay con quién pasear”, “a nadie le importa lo que yo haga”, “ya no me importa vivir”, “que tristeza, me quedé sola”, “no hay razón para esforzarme”, “¿quién me va a ver?” puede acabar con una depresión fuerte si no se detiene, y no quiere salir de ahí.

Esta situación es muy común entre los seres humanos pues no entendemos que el mundo es un conjunto de solitudes interactuando en él. Esto quiere decir de personas individuales, únicas, diferentes y por lo tanto solas en su esencia. No hay dos iguales, y en ese aspecto estamos solos. Sólo yo soy de cierta manera. Ésa es la maravilla del ser humano. Saber que no necesito de nada ni de nadie para realizarme, que soy un ser único con una misión única mientras esté vivo. Mi misión y mis decisiones en la vida sólo dependen de mí y de nadie más. Que pase lo que pase yo me tengo a mí mismo pues soy un ser lleno de capacidades y recursos con una serie de oportunidades únicas en la vida. Basta sólo con abrir la ventana de mi alma, en vez de estar lamentando por lo que ya no tengo junto, y ver todas las necesidades a mi alrededor, toda este mundo sin terminar, para poder encontrar mi misión y así, mi realización como ser humano.

La libertad de la que gozamos, gracias al libre albedrío que poseemos puede ser nuestro infierno o nuestra gloria. Todo depende de nosotros, de saber o no saber manejar el gran don de la solitud que nos pertenece. Hay que darnos cuenta que siempre habrá dos opciones a escoger ¿quiero vivir la vida con todos los retos que me proporciona o prefiero sufrirla? ¿Quiero ser víctima o líder de mi vida? ¿Qué pensamiento me lo está impidiendo? ¿Si yo sé lo que no quiero, entonces qué es lo que sí quiero? ¿Qué tengo que hacer para lograrlo? ¿Para qué me sirve lamentarme por algo que pasa en el mundo exterior en vez de agradecer el potencial que llevo dentro para poder actuar? ¿Qué tanto estoy consciente de que nadie va a hacer lo que yo deje de hacer? ¿Qué quiero que las personas piensen de mí y qué ejemplo quiero dejarles cuando yo ya no esté? Como vemos el verbo clave es el verbo “querer”. El poder está sujeto a qué tanto quiero.

Estas decisiones son sólo mías y de nadie más. Mi vida no puede estar condicionada a lo que pasa alrededor. Mi vida y las decisiones que tome, siempre serán mi responsabilidad (habilidad de responder) ante el mundo. Para poder pensar de esta manera tengo que entender lo que es la solitud.

Todos los seres humanos nacemos, morimos y vivimos en solitud. Lo único que tenemos es a nosotros mismos, y esa es la gran noticia. Nada ni nadie puede tener ingerencia en mi vida y en mis decisiones, a no ser que yo se la conceda y de esto tengo que estar consciente para poder responsabilizarme de mis conductas y mis estados emocionales.

La falta de responsabilidad en nuestra vida viene de la falta de habilidad para responderle a ella, a nuestra propia vida, pues nos dejamos invadir por todos los acontecimientos que nos pasan en el mundo exterior y contaminamos nuestro mundo interior.

Esta solitud que me pertenece es todo el potencial propio que llevo dentro. Empecemos a reflexionar sobre lo que pensamos de nosotros mismos y así darnos cuenta qué tenemos que hacer para despertar a esta solitud que es donde se encuentran todas las respuestas que necesitamos, y a la que todos tenemos acceso.

Programación Neurolingüística nos dice que “todos tenemos todos los recursos necesarios a cada momento”. Esto significa que en nuestra solitud (unicidad) es donde yo puedo ser tolerante, valiente, flexible, paciente, amoroso, seguro, fuerte, tener fe, esperanza y todo lo que me mueve hacia delante a una vida mejor.

Para entrar a esta solitud te propongo el siguiente ejercicio:

1.- Pinta un círculo imaginario en el piso enfrente de ti y ponle un color, el primero que se te ocurra.

2.- Piensa en un momento importante en tu vida donde te hayas sentido pleno, lleno de energía, feliz, con todas tus capacidades.

3.- Revívelo pensando justamente qué pasaba en ese momento, ¿que ves ahí? ¿Qué escuchas y cuáles son tus emociones en este lugar con lo que está pasando?

4.- Déjate sentir y en cuanto las emociones sean intensas, dá un paso y métete al círculo de color que colocaste en el suelo, con tu cuerpo erguido, tu cabeza al frente y respirando profundamente.

5.- Ahí cúbrete con ese color que pusiste en este lugar, frota las manos y álzalas por un momento. Respira profundo nuevamente y siente todas estas emociones.

6.- Baja tus manos y respirando dá un paso atrás y salte de ese círculo. Con este ejercicio, has formado un círculo de recursos y capacidades, al cual puedes entrar cada vez que lo necesites para tener acceso a todos estos recursos y que puede ir contigo a cualquier lugar. Lo único que tienes que hacer para obtener todos tus recursos es:

  • Imaginar este círculo en el piso, en la silla o en cualquier lugar, donde lo pongas
  • Respirando profundamente moverte hacia él
  • Visualizar y sentir ese color que te invade y acceder a todas estas capacidades y recursos instalados ahí
Ahora estás listo para entrar en acción ya que entraste en solitud contigo mismo.

Fuente:
http://www.estrategiaspnl.com

miércoles, 12 de septiembre de 2012

¿Soy el creador de mi vida o una víctima de mis circunstancias?

Los seres humanos tenemos una facultad que nos distingue del resto de especies del mundo animal: la capacidad de crear nuestros pensamientos, palabras, actitudes y comportamientos. Somos seres con consciencia, lo cual significa, entre otras cosas, que podemos elegir a que le damos energía en nuestras mentes. Existe la expresión: “Así como piensas, así es tu vida”. Según es la calidad de nuestros pensamientos ello determina la calidad de nuestra vida. Cada ser humano crea su propia realidad según la elección que realiza a cada momento de acuerdo a su estado de consciencia. Nuestras vidas son del color de nuestros pensamientos, si pensamos cosas tristes, estaremos tristes; si pensamos cosas alegres, estaremos contentos; como vemos, nuestra vida depende de nuestros pensamientos, tal como piensas, así eres.

Hemos de darnos cuenta que no podemos cambiar las circunstancias que nos rodean ni la realidad que nos toca vivir, lo único que está en nuestras manos es elegir la forma en que respondemos a lo que nos sucede. No podemos cambiar nuestro pasado, no podemos cambiar el hecho de que la gente actúe de cierta forma, no podemos cambiar lo inevitable. Lo único que podemos hacer es jugar con la única cuerda que tenemos, y esa es nuestra Actitud. Afirma Charles Swindoll que la vida es 10% lo que nos ocurre y 90 % cómo reaccionamos ante ella.

Tal como afirma Steven Covey: “La esencia del ser humano es la capacidad de dirigir su propia vida”. El ser humano actúa, los animales y los “robots” reaccionan. El ser humano es capaz de tomar decisiones basándose en sus valores. La facultad de elegir el rumbo de nuestra vida nos permite reinventarnos a nosotros mismos, cambiar nuestro futuro e influir con fuerza en el resto de la creación.

“Entre estímulo y respuesta hay un espacio, en ese espacio reside nuestra libertad y nuestra facultad para elegir la respuesta. En estas elecciones residen nuestro crecimiento y nuestra libertad”.

La trampa del victimismo
Debido a la actual coyuntura socio-económica que en la que se encuentra nuestra sociedad hay un “club” que en la actualidad está aumentando su numero de forma exponencial. El “Club de la queja y el victimismo”. Para ser admitido en este club es necesario demostrar que se poseen una determinadas actitudes, como por ejemplo: criticar, destruir, culpabilizar, enfadarse, controlar, reivindicar, insultar, agredir, etc. Sin duda es muy legítimo querer formar parte de este club, sin embargo deberíamos preguntarnos a donde nos acaba llevando esas actitudes y comportamientos.

El resultado es que muchas personas acaban encerradas en un ciclo vicioso de victimismo que acaba generando unos sentimientos de frustración, desanimo, desesperanza y depresión. Está bien protestar si vemos injusticias en el mundo, pero si solo hablamos de lo malo lo perpetuamos y acabamos en un callejón sin salida.

Como seres creativos que somos, con consciencia y capacidad de elección, debemos preguntarnos si hay otras actitudes más positivas y proactivas que nos permitan generar cambios en nuestro entorno a partir de nuestro interior, dando nuevas respuestas creativas a las adversidades que estamos viviendo y a los retos y desafíos que nos plantea la vida.

Cuando cambiamos, el mundo cambia
Al enfocarnos en nuestro propio espacio interior, podemos ir desarrollando conocimiento y claridad acerca de nuestra verdadera identidad. De esta manera podemos diferenciar lo que hacemos, es decir, nuestros roles, de lo que realmente somos. Al conocernos mejor, nos daremos cuenta de que la manera en que nos vemos a nosotros mismos influye sobre la manera en que vemos el mundo. Si cambio la visión de mí mismo, el mundo cambia.

Si queremos conocernos, debemos aprender a observarnos. Conocernos significa darnos cuenta de que la forma en que nos vemos a nosotros mismos, influye en nuestra percepción del mundo que nos rodea. Conocernos significa tomar conciencia de la diferencia entre cuerpo y alma, entre ser y humano, entre forma y contenido. Conocernos nos permite retornar a la realidad de nuestra paz interior inherente y volver a experimentar amor genuino y espiritual hacia nosotros mismos mismo y - como consecuencia - hacia quienes nos rodean.

Siempre que sea posible, desconectemos unos momentos del mundo exterior y enfoquémonos en nuestro interior. Es en el silencio y la calma de nuestra mente donde nos daremos cuenta de cuál es nuestra verdadera naturaleza original, la de un ser de paz. Así podremos permanecer en paz con nosotros mismos con el mundo que nos rodea. A partir de este rencuentro con nuestro ser verdadero, podemos proyectarnos hacia nuestras relaciones y responsabilidades, en nuestro hogar y en el trabajo.

Autor: Ramón Ribalta


martes, 11 de septiembre de 2012

Asertividad

La Asertividad se define como: "la habilidad de expresar nuestros deseos de una manera amable, franca, abierta, directa y adecuada, logrando decir lo que queremos sin atentar contra los demás. Negociando con ellos su cumplimiento". Está en el tercer vértice de un triángulo en el que los otros dos son la pasividad y la agresividad. Situados en el vértice de la pasividad evitamos decir o pedir lo que queremos o nos gusta, en la agresividad lo hacemos de forma tan violenta que nos descalificamos nosotros mismos.

Emplear la asertividad es saber pedir, saber negarse, negociar y ser flexible para poder conseguir lo que se quiere, respetando los derechos del otro y expresando nuestros sentimientos de forma clara. La asertividad consiste también en hacer y recibir cumplidos, y en hacer y aceptar quejas.

El elemento básico de la asertividad consiste en atreverse a mostrar nuestros deseos de forma amable, franca, etc., pero el punto fundamental consiste en lanzarse y atreverse. Lo que se expone en esta página puede ayudarnos a mostrar lo que sentimos y deseamos, porque sabemos que lo estamos haciendo de forma adecuada, que nadie se puede ofender. Esto nos ayudará a atrevernos a hacerlo.Pero cuando la ansiedad y el miedo son demasiado grandes hasta el punto de que nos dificultan o impiden expresar nuestros deseos, hemos de plantearnos una estrategia para superarla.

Existen técnicas y reglas que aprendidas y aplicadas nos permiten ejercerla de forma eficiente. Para ello hay que prepararse a negociar y hay que cumplir las reglas que implican una negociación eficiente. Existen también técnicas simples como el banco de niebla o asentir en principio, y el disco rayado, que nos facilitan su ejercicio concreto y cotidiano.

Para poder ejercitar la asertividad tenemos que tener capacidad de negociación. En la negociación se intenta conseguir lo que se quiere con el beneplácito del otro, que lógicamente también va a tener algunos beneficios. 


La realización de una negociación comprende varias fases. La primera, es la de preparación. En ella tenemos que pensar la estrategia que tenemos que seguir en el encuentro con el otro en el que se va a plantear los problemas y se va a hacer la negociación propiamente dicha.


Fase de preparación
Para poder conseguir cualquier cosa tenemos que saber como hacerlo y para ello hay que prepararse. Ir a un encuentro sin tener una mínima guía de comportamiento, cuando, además, no somos negociadores experimentados, nos expone a no lograr para nada los objetivos que perseguimos. Por tanto hay que preparar lo que se va a decir y a hacer en la negociación cara a cara con el otro.
Dentro de la preparación habría que distinguir dos subfases. La primera de preparación personal para evitar caer en la pasividad o en la agresividad y la segunda de preparación del diálogo que vamos a plantear al otro.


Fase de preparación personal

Se trata de una fase previa, necesaria para tener muy claros los objetivos que perseguimos en el encuentro. Es lo que nos motiva a la negociación. Cuando negociamos tenemos que tener la vista puesta en nuestros objetivos. Hay algunas cosas que nos pueden distraer de ellos y hacernos fracasar. Por ejemplo, nuestra emoción. No podemos confundir la emoción con el objetivo. Nos gustaría quedar bien, pero normalmente ese no es el objetivo. Nos gustaría machacar al otro, pero así no lograremos lo que realmente queremos. Nos gustaría que el otro reconociese que tenemos razón y que él estaba equivocado, pero nos tenemos que preguntar si ese es nuestro objetivo o si así solamente conseguiremos una recompensa de tipo emocional, mientras que nuestro objetivo se pierde. No hay que olvidar la máxima: “lo que cuenta son los hechos y no las palabras”. Si nos explayamos y nos descargamos emocionalmente puede que hayamos conseguido una recompensa a corto plazo, pero la pregunta que tenemos que hacernos es si hemos conseguido nuestros objetivos.
Hay que huir de juicios de intenciones. Si juzgamos las intenciones de la otra persona y nos basamos en ellas para plantear la relación con el otro, corremos el riesgo de contestar y reaccionar a las intenciones que pensamos que tiene el otro y perdemos de vista nuestros objetivos. Así podemos llegar a ser agresivos o a ser pasivos. Si nos han hecho algo que nos ha dolido y pensamos que lo ha hecho con buenas intenciones, podemos estar tentados de dejarlo pasar y no decir nada. Si juzgamos que lo ha hecho con mala intención, vamos a atacar su “maldad” y no los hechos y seremos agresivos. En una negociación no se trata de agredir y someter al otro, aunque lo veamos como un rival. Hay que darle una salida, más o menos airosa porque si no se revolverá contra nosotros. Querer que nos reconozca lo equivocado que está y se someta completamente a nuestros deseos puede ser un objetivo emocional, que compense la humillación que hemos sentido, pero ¿es realmente nuestro objetivo? Sí tenemos que intentar entender que cosas son las pueden motivar al otro para hacer lo que nosotros queremos que haga.
Tenemos que pensar en como crear la oportunidad de la negociación. Si es algo pendiente desde hace mucho tiempo y que queremos abordar, hay que buscar al otro y plantear un tiempo y un espacio en el que se pueda dar la negociación. Es lo primero que tenemos que conseguir del otro. Sin ellos no se consigue, no es posible hacer la negociación. En muchas ocasiones no hay que buscar la oportunidad, es la propia situación en la que se genera el problema. Pero en ella nos puede ocurrir que cuando el otro se va es cuando se nos ocurre aquello teníamos que haber dicho. Recuerda: Siempre hay una segunda oportunidad aunque haya que crearla. Crear la oportunidad es buscar al otro y plantear, aunque sea por enésima vez, el tema que nos ocupa. Cualquier frase introductoria como decirle, “de lo que hablamos ayer me gustaría comentarte algo” o frases parecidas para iniciar la conversación son ayudas inestimables para crear la oportunidad.
Con los objetivos claros podemos controlar nuestra agresividad y motivarnos para dejar de ser pasivos, con la oportunidad creada y el entendimiento de lo que el otro espera podemos preparar el momento concreto de la negociación.


Preparación del diálogo

Sin perder de vista que lo importante es lo que hagamos y lo que decimos solamente puede ser una guía para que el otro sepa cuales van a ser nuestros siguientes pasos, tenemos que preparar aquello que vamos a decirle. El diálogo que tengamos con él tiene que cumplir los siguientes requisitos para ser un diálogo asertivo:

  1. Describir los hechos concretos. Se trata de poner una base firme a la negociación, en la que no pueda haber discusión. Cuando describimos hechos que han ocurrido el otro no puede negarlos y así podemos partir de ellos para discutir y hacer los planteamientos precisos. En este punto es donde más tenemos que evitar hacer los juicios de intenciones. No se trata de decir “eres un vago” sino decir, “vengo observando que te levantas desde hace ya varias semanas a la hora de comer”. Diremos me has dicho 10 veces “no sirves para nada” en lugar de “me quieres denigrar y hundir” (juicio de intenciones.)
  2. Manifestar nuestros sentimientos y pensamientos. Es decir comunicar de forma contundente y clara como nos hace sentir aquello que ha ocurrido y que juicio moral o de pensamiento nos despierta. Es el momento de decir “estoy hasta las narices de esta situación y no la soporto más”, o “me he sentido humillado y denigrado”. Hay que recordar que no se trata de que el otro lo encuentre justificado o no. Le puede parecer desproporcionado, o injusto, o... pero es lo que nosotros sentimos y tenemos derecho a hacerlo así, no aceptaremos ninguna descalificación, defenderemos nuestro derecho a sentirnos tal y como le decimos. Le estamos informando, no le pedimos que nos entienda o nos comprenda, por eso no puede descalificarnos ni aceptaremos críticas a nuestros sentimientos, emplearemos la técnica del banco de niebla combinado con el disco rayado (ver más abajo.)
  3. Pedir de forma concreta y operativa lo que queremos que haga. No se trata de hablar de forma general o genérica, “quiero que seas más educado”, “quiero que me respetes” “quiero que no seas vago”; sino que hay que ser concreto y operativo: “quiero que quites los pies de mi mesa”, “quiero que cuando hablo me mires a los ojos y contestes a lo que te pregunto”, “quiero que estudies tres horas diarias”. Son conductas concretas que el otro puede entender y hacer.
  4. Especificar las consecuencias. Es decir, aquello que va a ocurrir cuando haga lo que se le ha pedido. Se le podría plantear también las consecuencias que tendrá para él no hacerlo, pero es preferible especificar lo que va a obtener de forma positiva. De otra manera lo que planteamos es un castigo y los castigos son mucho menos efectivos que los premios o refuerzos. Muchas veces se trata solamente de una forma de presentación, hay que tener en cuenta que frecuentemente algo que puede ser planteado como un castigo, si no lo hace, se puede ver  como algo positivo si lo hace. “Si no lo haces tendrás un castigo” se puede convertir en “Si lo haces evitarás que haga lo que no quiero hacer que es lo que supone un castigo para ti, que es algo que, por supuesto, yo tengo que hacer para ser consecuente con mis objetivos y los sentimientos que ya he expresado”.

Ensayo

Lo que se ha preparado, preferentemente por escrito, se tiene que ensayar hasta aprendérselo de memoria. Cuando vamos a un examen nos ponemos nerviosos y se nos olvidan muchas cosas, puede pasarnos lo mismo en este caso y por eso hay que aprendérselo de memoria.
Si la situación nos causa alguna ansiedad, es una razón más para el ensayo. Cuando nos imaginamos la situación de la negociación nos estaremos exponiendo a ella en la imaginación y al menos cuando pensemos en hablar con el otro no nos pondremos nerviosos y comenzaremos nuestra negociación en mejor posición anímica. Si nos ponemos nerviosos podemos acogernos al diálogo que hemos preparado en la seguridad de que vamos a expresar nuestros deseos de forma completa. Cuando la ansiedad es demasiado grande hasta el punto de que nos impide expresar nuestros deseos, hemos de plantearnos una estrategia para superarla. 

Ejecución

En la fase de ejecución hay que tener en cuenta algunas técnicas básicas que nos permiten llevar a cabo lo que hemos preparado. No hay que olvidar nunca que nuestros objetivos están plasmados en el diálogo que hemos preparado y que nuestra meta inmediata es decirlo. No se trata de contestar a todas las digresiones que nos hagan, no es necesario ser rápido y agudo para poder responder de forma inmediata a todo lo que nos digan. Se trata de emplear la técnica del banco de niebla, que también se llama aceptar en principio, seguida de la del disco rayado.
La forma de hacerlo es diciendo que “puede que lleves razón; pero...” (banco de niebla) lo que yo quiero decir es que.. “ y se sigue con el diálogo en el punto en el que fuimos interrumpidos o repitiéndolo desde el principio (disco rayado.) Puede parecer muy limitado y que vamos a hacer el ridículo, pero es sorprendente lo efectivo y natural que resulta. Si saca otros temas, también importantes, no perdamos de vista nuestro objetivo, tenemos que acabar con lo que ha motivado la negociación para poder seguir más tarde con lo que acaba de plantear: en ningún momento hay que perder de vista nuestro objetivo, plasmado en el diálogo preparado.
Ejemplos

PRACTICA
Situación 1:

Un amigo acaba llega a cenar, pero una hora más tarde de lo que había dicho. No ha llamado para avisar que se retrasaría. Estás irritado por la tardanza. Tienes estas alternativas:
1. CONDUCTA PASIVA. Saludarle como si tal cosa y decirle “Entra la cena está en la mesa”.
2. CONDUCTA ASERTIVA. He estado esperando durante una hora sin saber lo que pasaba (hechos). Me has puesto nervioso e irritado (sentimientos), si otra vez te retrasas avísame (conducta concreta) harás la espera más agradable (consecuencias).
3. CONDUCTA AGRESIVA. Me has puesto muy nervioso llegando tarde. Es la última vez que te invito.
Situación 2:

Un compañero de trabajo te da constantemente su trabajo para que lo hagas. Decides terminar con esta situación. Puedes crear la situación preguntándole como lleva su trabajo o esperar a que el la cree cuando te pida otra vez a le ayudes haciéndole algo. Las alternativas podrían ser:
1. CONDUCTA PASIVA. Estoy bastante ocupado. Pero si no consigues hacerlo, te puedo ayudar.
2. CONDUCTA AGRESIVA. Olvídalo. Casi no queda tiempo para hacerlo. Me tratas como a un esclavo. Eres un desconsiderado.
3. CONDUCTA ASERTIVA. Muy frecuentemente me pides que te eche una mano en el trabajo que te asignan, porque no te da tiempo o porque no sabes hacerlo (hechos). Estoy cansado de hacer, además de mi trabajo, el tuyo (sentimientos), así que intenta hacerlo tú mismo (conductas), seguro que así te costará menos la próxima vez (consecuencias).
Situación 3

Vas a un restaurante a cenar. Cuando el camarero trae lo que has pedido, te das cuenta de que la copa está sucia, con marcas de pintura de labios de otra persona. Se trata de llevarse bien con el camarero para que nos sirva bien, pero eso no es un buen servicio, podrías:
1. CONDUCTA PASIVA. No decir nada y usar la copa sucia aunque a disgusto.
2. CONDUCTA AGRESIVA. Armar un gran escándalo en el local y decir al camarero que como el servicio es asqueroso nunca volverás a ir a ese establecimiento.
3. CONDUCTA ASERTIVA. Llamar al camarero y, mirándole a la cara y sonriendo, pedirle que por favor le cambie la copa.

Hechos ____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Sentimientos ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Conductas ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Consecuencias ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

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(Capítulo del libro del Dr. José Antonio García Higuera; Terapia Psicológica en el Tartamudeo, de Van Riper a la Terapia de Aceptación y Compromiso de Editorial Ariel Psicología)