De la misma manera que el hombre ve la vida a través de los ojos físicos, la casa mira el exterior a través de las ventanas. Los ojos de tu hogar te pueden ofrecer una vista agradable como: bonitos paisajes o no, como: calles estrechas y ruidosas, patios o galerías interiores.
En el caso que lo que ofrezca tu ventana no sea de tu agrado, seguro que puedes hacer alguna cosa para mejorarla.
Algunas recomendaciones para mejorar las ventanas, colocar: plantas, colgantes, visillos finos o cortinas, cuadros, cristales que transformen la luz, vinilos, etc.
Las ventanas tanto vistas desde el exterior como del interior aumentan su belleza con plantas y cortinas. Las cortinas o visillos además son necesarios según el Feng Shui, para perseverar la intimidad y mejorar la protección y la seguridad.
Ni que decir la importancia de conservar la limpieza de los cristales de las ventanas. Los cristales socios perjudican la salud de los ojos; sería algo así como ver a través de telarañas.
No son recomendables los cristales oscurecidos o ahumados. Igual que nuestros ojos necesitan una mirada trasparente.
La polaridad de la Energía Yin y el Yang, antagónica y complementaria.
El Yin y el Yang hay que aplicarlo siempre en cualquier situación de la vida y en cualquier espacio, solo que en caso de las ventanas se hace más evidente.
El interior de un espacio es Yin y el exterior es Yang. La noche es Yin; el día Yang. La luna Yin, el Sol Yang.
Cuando llega la noche yin, con su luna, absorbe la energía yang que ha activado y regenerado durante el día el Sol y la Luz yang de cualquier estancia.
De aquí nace la necesidad de cubrir todas las ventanas de cortinas, persianas, estores..., de la misma manera que nuestros ojos necesitan los parpados para protegerse, las ventanas también necesitan protección.
Durante el día tienes que abrir o correr las cortinas para activar la energía Yang y por la noche cerrar.
Exceso de Yin, no es aconsejable; exceso de Yang, no es aconsejable.
"Demasiado de algo bueno, sigue siendo demasiado"
Sin equilibrio no podemos aprovechar ni absorber la Energía Vital (Chi)
Tener en cuenta el tamaño y la forma de las ventanas
La medida debe ser proporcional al espacio en que se encuadran.
En la actualidad están de moda los grandes ventanales que a veces ocupan toda una pared y que generalmente comunica con el jardín. Visualmente queda precioso, pero ¿qué pasaría si nuestra cara fuera todos ojos? Esto es una desproporción y es desaconsejable. En esta situación se fuga de Chi o la Energía. También hay fuga de Chi cuando la puerta y la ventana están enfrentadas.
Las ventanas excesivamente pequeñas tampoco son recomendables. La entrada del Chi sería menor, esto influenciaría negativamente en todas las áreas de la vida: Prosperidad, Salud, Creatividad etc. En general decaimiento, menos energía.
Cuando nuestros niveles de energía son altos tenemos una mayor capacidad creadora.
La forma de las ventanas también es importante, pero cada estancia es particular. El caso más notorio perjudicialmente, son los cierres de ventanas que caen de arriba abajo que pueden recordar la hoja de una guillotina.
Las ventanas que no se pueden abrir, rotas o encalladas
Las ventanas tienen que abrirse siempre de par en par, para favorecer la circulación del aire y la renovación de la Energía Vital (Chi) A nivel puramente fisiológico el aire no renovado favorece la acumulación de toxinas, alérgenas u iones positivos. Es importante que la energía fluya sin obstáculos, para sentir la renovación, libertad y salud. Se abren las ventanas para ventilar y en caso de frío, se vuelven a cerrar.
Mirar cerca, mirar a lo lejos
Si tenemos una casa en la montaña, tendremos vistas espaciosas en la lejanía. Sería una vista Yang. Si vivimos en la una ciudad al mirar por una ventana, nuestra vista alcanzaría pocos metros, con lo cual sería una vista menos Yang. Y si por el contrario estamos en el interior de un espacio, sería una vista completamente Yin. No hay mejor ni peor. Solo es importante para conocer que necesitamos en cada momento, por ejemplo:
Un señor/a escritor/a, se va a la montaña para inspirarse. Se pasea por los alrededores (Yang), y se carga de energía. En el interior de la casa (Yin), más interiorizado puede volcar su creatividad. Si siempre estuviese en el exterior, a las pocas horas su creatividad se desvanecería.
Reconocer si estás en una situación yin o yang, te ayuda a mejorar tu vida y ser más eficiente.
Como siempre utiliza la lógica y sentido común, junto con un poquito de intuición y tendrás éxito.
Josefina SalvadorConsultora y Formadora en Feng Shui.
Fundadora de la Escuela de Feng Shui para Occidente.
Consultas y formación presencial y On–Line.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario