viernes, 30 de noviembre de 2012

Soy lo que hago o lo que soy

Señor Sinay: siempre me pregunté por qué elegí la carrera de Contadora Pública y no encontraba respuesta que me diera paz. Hoy, volviendo de Sierra de la Ventana, un hermoso lugar que inició mi despertar después de la pérdida de mi único hermano hace ya 13 años, sentí algo distinto. Siempre creí que cuando describimos o contamos algo utilizamos palabras relacionadas con nuestro trabajo (por ejemplo, en mi caso, costo, beneficio o amortizo) y me encontré con que quizá la carrera elegida es la que mejor justificaba mi lugar en el mundo de acuerdo con mi ego, y de ahí mis malestares.
Adriana Martinez

¿Qué trabajo estamos destinados a hacer en la vida? ¿En qué tarea nuestra alma se alimentará y expresará, en cuál aportaremos al todo del que somos parte? ¿Cuál labor nos dará paz e integridad, más allá de los esfuerzos que requiera? ¿En qué ocupación nos alumbrará el sentido? Estos interrogantes no se refieren a factores como el éxito social, la fecundidad económica o el prestigio que nos concede la mirada ajena. Si evadimos aquellas preguntas, estos factores pueden convertirse en pesadas cargas y enfrentarnos a dudas crueles: ¿Qué hago aquí? ¿Para qué sigo en esto si no me realizo? ¿Cómo me juzgarán si renuncio al éxito, al prestigio, al bienestar material?

"Hay muchas personas que hoy sufren porque su trabajo carece de alma", afirma el ex sacerdote, músico y psicoterapeuta Thomas Moore en "Un trabajo con alma". Sufrimos, creo, cuando nos convertimos en aquello que hacemos, cuando amoldamos nuestras capacidades, recursos, inclinaciones, aspiraciones y potencialidades a la forma rígida de una profesión o un oficio. Solemos hacer eso para satisfacer expectativas ajenas, recibir reconocimiento, encontrar seguridad material, ocultar vulnerabilidades no admitidas, etcétera. Así, somos lo que hacemos, y nuestra identidad, el ego del que habla nuestra amiga Adriana, es nuestro trabajo. Ego es la identidad "oficial" de cada quien, aquella que, compuesta con retazos de nuestro ser total y nuclear (y a costa de otros aspectos que quedan relegados, olvidados o negados), nos permite encontrar "un lugar en el mundo". Lugar que nos será reconocido a condición de que nos ajustemos a un rol. Puede haber suculentas recompensas, pero el alma no estará cómoda allí y lo hará saber mediante insatisfacción, ansiedad, angustia, irritabilidad o síntomas físicos.

Distinto es cuando hacemos lo que somos. Cuando buscamos la tarea, profesión o quehacer que amplifica, expresa y da forma y sentido a toda aquella materia prima espiritual, emocional, creativa y fecunda que nos hace únicos y representa nuestra verdadera e intransferible identidad. Entonces encontramos más que "un" lugar en el mundo, encontramos nuestra razón de ser en el universo. Esto ocurre, dice Moore, cuando seguimos nuestro daimon. Este es, según los antiguos griegos, padres de nuestra cultura, un poderoso impulso que empuja a las personas en una dirección, aún a riesgo de confusión o temor. Quien toma a su daimon en serio -afirma Moore- debe atender a esas preguntas y voces interiores que le advierten sobre la inconveniencia de una tarea, la necesidad de un cambio, la insatisfacción en un cargo. Voces que llevan a correr un riesgo. Y nos preguntan qué nos hace sentir vivos, qué nos motiva, qué necesitamos para encontrar sentido en lo que hacemos. Preguntas como: "¿Lo que hago es de verdad lo que quiero hacer? ¿El que lo hace soy yo o es el que otros esperan que yo sea?"

Si soy lo que hago, cualquier riesgo que amenace a mi trabajo o profesión pondrá en duda mi identidad. El día que (por despido, enfermedad, descalabro económico o cualquier imponderable) no pueda hacer eso que me identifica, no existiré. Pero si, en cambio, hago lo que soy, mi ser puede reflejarse de un modo único en más de una tarea, oficio o profesión. Estos serán sólo medios y no fines. Tendré un trabajo para la vida y no una vida atada a un trabajo. Haga lo que hiciere será una labor inspirada, un trabajo con alma que, así sea por una sola acción realizada, dará sentido a mi vida. Trabajo con alma es el que nos permite expresar nuestros valores en un contexto ético, el que nutre al contexto en que vivimos, empezando por el entorno más cercano y tangible, y es el que expresa aquello que nos hace únicos, aunque muchos hagan la misma tarea. La labor que estamos destinados a hacer en este mundo puede tardar una vida en revelarse, dice Moore, y mientras buscamos, quizá desempeñemos más de un oficio o profesión. Lo importante es saber en cada momento si soy lo que hago o hago lo que soy.

 - Diálogos del Alma, por Sergio Sinay

El zen vive en el presente


El futuro de la humanidad se acercará cada vez más al enfoque del zen, porque el encuentro entre Oriente y Occidente sólo es posible a través de algo como el zen, que es terrenal y sobrenatural a la vez. Occidente es muy terrenal, y Oriente muy sobrenatural.

El zen me parece la única posibilidad, porque en el zen, el Buda y Lao-Tzu se han convertido en uno. El encuentro ya ha tenido lugar. La semilla ya está ahí, la semilla del gran puente que puede convertir en uno a Oriente y Occidente. El zen será el punto de encuentro. Cuenta con un gran futuro... un gran pasado y un gran futuro.

Y el milagro radica en que el zen no esté interesado ni en el pasado ni en el futuro. Todo su interés está en el presente. Tal vez por eso sea posible el milagro, porque pasado y futuro están unidos por el presente.

El presente forma parte del tiempo. ¿Habéis pensado en ello alguna vez? ¿Cómo es el presente de lago? El pasado tiene una duración, y también el futuro. ¿Pero cuánto dura el presente? ¿Cuánto dura? ¿Se puede medir el presente entre el pasado y el futuro? Es inconmensurable; casi no es. No es tiempo, para nada: es la infiltración de la eternidad en el tiempo.

El zen vive en el presente. Toda su enseñanza trata de cómo estar en el presente, de cómo salir del pasado, que ya no es, y de cómo no implicarse en el futuro, que todavía no es, estando enraizado, centrado, en lo que es.

El enfoque del zen es de inmediatez, pero por eso mismo puede tender un puente entre pasado y presente. Puede tender un puente entre muchas cosas: el pasado y el futuro, puede unir Oriente y Occidente, el cuerpo y el alma. Puede tender un puente entre los mundos irreconciliables: este mundo y el otro, entre el mundano y el sagrado.

Osho

El amor, lo más elevado de la vida


¿Por qué deberías casarte? Si amas a alguien, vive con alguien; forma parte de tus derechos básicos. Puedes vivir con alguien, puedes amar a alguien.

El matrimonio no es algo que ocurra en el cielo; ocurre aquí, a través de la sociedad y no quieres sentirte solo y separado, ponle claro a tu esposa o a tu marido que este matrimonio es sólo un juego: “Nunca lo tomes en serio”. Yo seguiré siendo tan independiente como antes de la boda, y tú seguirás siendo tan independiente como antes de la boda. Ni yo voy a interferir en tu vida ni tú vas a interferir en la mía; viviremos como dos amigos juntos, compartiendo nuestras alegrías, compartiendo nuestra libertad; pero sin convertirnos en una carga el uno para el otro.

Y en cualquier momento que sintamos que la primavera ha pasado, que la luna de miel ha pasado, seremos lo suficientemente sinceros como para no seguir aparentando, y decirnos que nos hemos amado mucho y que seguiremos estando agradecidos el uno al otro para siempre, y los días de amor continuarán en nuestras memorias, en nuestros sueños, como algo maravilloso; pero la primavera se acabó. Nuestros caminos han llegado a un punto donde, aunque sea triste, tenemos que partir, porque ahora, vivir juntos ya no es una canción de amor.

El amor no debería ser reducido a estúpidos rituales. Y el amor y la libertad van juntos; no puedes elegir a uno y dejar al otro. Un hombre que conoce la libertad está lleno de amor, y un hombre que conoce el amor siempre está dispuesto a dar libertad. Si no puedes dar libertad a la persona que amas, ¿a quién se la vas a dar? Dar libertad no es otra cosa que confiar.

La libertad es una expresión del amor. Así que, estés casado o no, recuerda: todos los matrimonios son falsos; son sólo conveniencias sociales. Su propósito no es encarcelaros y ataros el uno al otro; su propósito es ayudaros a crecer el uno al otro. Pero el crecimiento necesita libertad; y en el pasado, todas las culturas han olvidado que sin libertad el amor muere.

Osho

Amigabilidad, la clase más pura de amor


La amistad ha sido uno de los temas más ignorados por la mayoría de los filósofos, tal vez damos por sentado que entendemos lo que significa, de ahí que hemos permanecido ignorantes de su profundidad... de sus posibilidades de crecimiento... de sus diferentes matices y diferentes significados.

Lo más importante es recordar esto: uno necesita amigos porque somos incapaces de estar solos. Y en tanto que uno necesite amigos no puede ser verdaderamente un amigo, porque la necesidad reduce al otro a un objeto. Sólo el hombre que es capaz de estar solo, es también capaz de ser un amigo... Pero en ese caso, no es producto de su necesidad, sino de la dicha; no surge del hambre, ni de la sed, sino la abundancia de su amor que quiere compartir.

Cuando existe una amistad así, no debe ser llamada amistad, porque ha tomado una dimensión totalmente diferente: yo la llamo "amigabilidad"... Ha ido más allá de la relación, porque todas las relaciones son de un modo u otro, obligaciones, te hacen esclavo y hacen esclavos a los otros.

La "amigabilidad" es la clase más pura de amor. No es una necesidad, no es una exigencia. Es pura abundancia, éxtasis desbordante.

Zarathustra dice: "Nuestra confianza en los demás delata lo que quisiéramos creer de nosotros mismos".

El hombre que cree en otros es un hombre que tiene miedo de creer en sí mismo. El cristiano, el hindú, el mahometano, el budista, el comunista, nadie es suficientemente valiente como para tener fe en su propio ser. Cree en otros, y cree en aquellos que creen en él. Es realmente ridículo; tu amigo te necesita, tiene miedo de su soledad... tú lo necesitas porque tienes miedo de tu soledad... Ambos tienen miedo de la soledad. ¿Piensas que por estar juntos... ¿su soledad desaparecerá? Será simplemente redoblada o quizás multiplicada, es por esto que todas las relaciones conducen a una miseria mayor, a una mayor angustia.

Nadie puede colmar tu vacío. Tienes que enfrentar tu vacío. Tienes que vivirlo, tienes que aceptarlo. Y en esta aceptación se esconde una gran revolución, una gran revelación.

Osho

jueves, 29 de noviembre de 2012

Palabras de Buda


“Todo lo que somos es el resultado de lo que hemos
Pensado;: esta fundado en nuestros pensamientos y
Esta hecho de nuestros pensamientos”

“Avanzando estos tres pasos, llegara mas cerca de
los dioses: Primero: Habla con verdad. Segundo: No
te dejes dominar con la cólera. Tercero: Da, aunque
no tengas mas que muy poco que dar”

“Para enseñar a los demás, primero has de hacer tu
algo muy duro: has de enderezarte a ti mismo”

“Tu peor enemigo no te puede dañar tanto como tus
propios pensamientos. Ni tu padre, ni tu madre, ni tu
amigo mas querido, te pueden ayudar tanto como tu
propia mente disciplinada”

“El odio no disminuye con el odio. El odio disminuye
con el amor”

“El dolor es inevitable pero el sufrimiento es
opcional”

El coraje, lo contrario del miedo



Siempre debes estar preparado para renunciar a lo conocido —debes estar deseoso de abandonarlo—, sin esperar a que madure. Salta a algo nuevo... su novedad y su frescura son muy atractivas. Entonces tienes coraje. El miedo a la muerte es el mayor miedo y el más destructivo para tu coraje.


Sólo puedo sugerirte una cosa. Ahora no puedes volver a tu muerte pasada, pero puedes empezar a hacer una cosa: estar siempre preparado para pasar de lo conocido a lo desconocido, en cualquier cosa, en cualquier experiencia. Es mejor, aunque luego lo desconocido resulte ser peor que lo conocido, pero ésa no es la cuestión. Lo que importa es tu cambio de lo conocido a lo desconocido, tu prontitud para pasar de lo conocido a lo desconocido. Eso es enormemente valioso. Sigue haciendo lo mismo en toda clase de experiencias. Te preparará para la muerte, porque cuando llega la muerte no puedes decidir de repente: «Elijo la muerte y abandono la vida.» Esas decisiones no se toman de golpe.

Tienes que ir paso a paso, preparándolo, viviendo cada momento. A medida que te vas familiarizando con la belleza de lo desconocido, empiezas a tener una cualidad nueva. Está ahí, pero nunca ha sido usada. Antes de que llegue la muerte, aprende a pasar de lo conocido a lo desconocido. Recuerda que lo nuevo siempre es mejor que lo viejo.


Dicen que no todo lo viejo es oro. Yo digo que aunque todo lo viejo sea oro, olvídalo. Elige lo nuevo, tanto si es de oro como si no, eso no importa. Lo que importa es tu elección: tu elección de aprender, tu elección de experimentar, tu elección de adentrarte en la oscuridad. Poco a poco, tu coraje empezará a funcionar. Y la agudeza de la inteligencia no está separada del coraje, sino que forma casi una unidad orgánica.


Junto con el miedo está la cobardía e, inevitablemente, una mente retrasada, mediocre. Van juntos, se apoyan el uno al otro. Junto con el coraje está la agudeza, la inteligencia, la apertura, una mente sin prejuicios, la capacidad de aprender... van juntos.

Empieza con un ejercicio fácil, que es: siempre que tengas oportunidad de elegir, recuerda, elige lo desconocido, lo arriesgado, lo peligroso, lo inseguro, y no te equivocarás. Y sólo así... la muerte podrá convertirse en una experiencia tremendamente reveladora, y podrás tener una percepción de tu nuevo nacimiento, no sólo una percepción sino incluso una cierta elección. Con conciencia, puedes elegir una determinada madre o un determinado padre. Normalmente, todo esto se hace inconscientemente, es accidental, pero un ser humano que se muere con consciencia, nace con consciencia.

Osho

Confianza


El contenido del mensaje de Confianza nos deja un claro mensaje de reflexión, sobre tu actitud actual, esta carta te dice directamente que no pierdas el tiempo de tu vida por aquellas cosas que cuando el tiempo se pase no van a seguir estando. Suele pasar en la mayoría de nosotros que le damos importancia a ciertas cosas materiales que cuando pasemos de esta vida a la otra no van a conservarse y es por esta simple realidad física que es una carta que apunta hacia la reflexión y crecimiento personal.

Quizás este es el momento propicio para que dediques más tiempo hacia la meditación contigo mismo, es momento crucial para que comiences a profundizar tus pensamientos, para empezar a darle claridad a las reflexiones. este mensaje nos recuerda también la importancia de creer y confiar, de esta manera uno puede liberarse y permitirse ciertos espacios que de seguro, hoy en día, no los tienes. Anuncia pequeños cambios, te invita a que salgas de la monotonia de tus días cotidianos.

A veces se suelen confundir los términos, y por ciertas malas experiencias podemos volvernos desconfiados, pero de esta manera podemos cometer grandes errores, es cierto que uno no puede dejar al azar las acciones de nuestros días y es muy cierto que tampoco vamos a invitar a nuestros hogares a las personas que no conocemos, pero también es real que si nos encontramos desconfiando de todo lo que nos rodea encontramos con facilidad un estancamiento.

Para crear hay que creer, y de eso depende nuestra fuerza de voluntad, no podemos esperar que las cosas lluevan desde el cielo, para empezar a cambiar se trata de confiar en uno mismo y creer en que uno puede remediar las situaciones. De eso se trata la confianza que representa este mensaje , es tiempo de que te animes, de que alimentes tu fuerza interior para la creación de grandes momentos, anímate a cambiar tu actitud, comparte, y sigue creciendo que para eso estamos. Es importante que nuestros corazones se encuentren también trabajando, ya que si opacamos o escondemos sus impulsos energéticos es como dejar marchitar una bonita flor, todo nuestro entorno depende de nuestro equilibrio, y nuestro equilibrio se gana cediendo y otorgando, no sólo resistiendo, confía en ti mismo y tendrás más de la mitad de los deseos resueltos.

Osho

El Amor


Un poco de lucha es imprescindible. Nos enriquecemos con las tormentas los relámpagos, los truenos y la tristeza como así también con la alegría y la felicidad.

Me contaron una antigua parábola debe ser muy antigua porque Dios solía vivir en la tierra en esos días...

Un día llegó un hombre, un viejo granjero, y le dijo: "Mira, tú puedes ser Dios y puedes haber creado el mundo, pero debo decirte algo: no eres un granjero. Ni siquiera sabes el abc del trabajo en la granja. Tienes algo para aprender".
Dios dijo: "¿Qué me aconsejas?"
El granjero contestó: "Sólo dame un año de tiempo y déjame todas las cosas a mí, y verás qué ocurre. ¡Ya no quedará pobreza!"
Dios estaba dispuesto a ello y le dio un año al granjero. Naturalmente, el granjero pidió lo mejor, sólo tuvo pensamientos de lo mejor nada de truenos, ni fuertes vientos, ni peligros para los cultivos. Todo confortable, acogedor y él estaba muy contento. El trigo crecía tan alto... Cuando quería sol, había sol, cuando quería lluvia, había lluvia, y tanta como necesitaba. Ese año todo estuvo bien, matemáticamente bien. El trigo crecía tan alto...
El granjero iba a Dios y le decía: "Mira, esta vez los cultivos serán tales, que por diez años, aún si la gente no trabaja, habrá suficiente comida". Pero cuando se cosecharon los cultivos, las espigas estaban vacías. El granjero estaba sorprendido. Le preguntó a Dios: "¿Qué pasó? ¿Qué salió mal?"
Dios le dijo: "Porque no hubo desafío, porque no hubo conflicto ni fricción, porque evitaste todo lo malo, el trigo quedó impotente. Un poco de lucha es imprescindible. Se necesitan tormentas, truenos, relámpagos. Movilizan el alma dentro del trigo".

Esta parábola es de inmenso valor. Si sólo estás feliz, la felicidad perderá todo su significado. Será como si alguien escribe con tiza blanca sobre una pared blanca. Puede seguir escribiendo, pero nadie podrá jamás leerlo. La noche es tan necesaria como el día. Y los días de tristeza son tan esenciales como los días de felicidad. A esto llamo comprensión. Y lentamente, cuanto más ves el ritmo de la vida, el ritmo de la dualidad y de la polaridad, dejas de preguntar, dejas de elegir. ¡Entonces has descubierto el secreto!
Vive con este secreto y te sorprenderás de pronto: ¡qué grandioso es el regalo de la vida! ¡Cuánto te es dado a cada momento! Pero has estado viviendo de tus expectativas, de tus diminutos y triviales deseos y porque las cosas no se adecuaban a tus deseos, te sentías desgraciado.
Cuando sigues la naturaleza de las cosas, no se arroja ninguna sombra. Aún la tristeza es luminosa en ese instante. No es que la tristeza no vendrá. Ella vendrá, pero no será tu enemiga. Te convertirás en su amigo, porque verás su necesidad. Podrás ver su gracia y podrás ver porqué está allí y porqué es necesaria. Y sin ella serás menos, no más.

Osho - Carta 48 del Neo Tarot

El niño rebelde


Nadie permite a sus hijos bailar, cantar, gritar y saltar. Por razones triviales quizá pueden romper algo, quizá se les moje la ropa con la lluvia si corren en el exterior, por pequeñas cosas se destruye por completo una gran cualidad espiritual: la alegría.

El niño obediente es elogiado por sus padres, por sus profesores, por todo el mundo, y el niño juguetón es censurado. Sus ganas de jugar podrían ser totalmente inofensivas, pero es censurado porque existe un peligro potencial de rebelión. Si el niño continúa creciendo con total libertad para ser juguetón, acabará siendo un rebelde. No será fácilmente esclavizado; no le podrán reclutar fácilmente en un ejército para destruir gente, o para que le destruyan.

El niño rebelde se convertirá en un joven rebelde. Entonces no podrás obligarle a que se case; no podrás obligarle a aceptar un determinado empleo; no se le podrá obligar a satisfacer los deseos incompletos y los anhelos de sus padres. La juventud rebelde seguirá su propio camino. Vivirá su propia vida de acuerdo con sus deseos más íntimos, no de acuerdo con los ideales de otra persona.

Por todas estas razones, se sofoca su capacidad de jugar, se la aplasta desde el principio. Nunca se le da una oportunidad a tu naturaleza. Poco a poco empiezas a cargar con un niño muerto en tu interior. Este niño muerto en tu interior destruye tu sentido del humor: no puedes reírte totalmente, con todo tu corazón, no puedes jugar, no puedes disfrutar de las cosas pequeñas de la vida. Te vuelves tan serio que tu vida, en vez de expandirse, comienza a encogerse.

La vida debe ser, en cada momento, una creatividad preciosa. No importa lo que crees, podrían ser sólo castillos en la arena, pero todo lo que haces debería salir de tu capacidad de jugar y de tu alegría.

Osho

miércoles, 28 de noviembre de 2012

El paraíso


El paraíso no está en otro lugar. El paraíso no es algo geográfico. No está por encima de las nubes, en el cielo; está dentro de ti. No está en ningún otro momento, después de la muerte. Está en tu interior ahora mismo, estás hecho de él, de modo que no hace falta buscar e indagar en ningún otro lugar.

Lo único que necesitas es relajarte y estar en ti mismo, sumergirte profundamente en tu propio ser, tan profundamente que todo el mundo desaparezca como si no existiera en ese momento, de modo que lo único que exista sea tu conciencia. Toda la existencia se convierte en no-existencial, sencillamente tu vida es todo. Y su pureza, porque no está contaminada por nada... No hay nada reflejado en tu espejo. Tu conciencia es pura, sin ninguna onda, sin ninguna ola. En ese momento llegas a conocer lo que es el paraíso.

No lo hemos perdido en ninguna parte, no nos han expulsado del paraíso. Existe ya en nuestro interior, siempre ha existido allí, pero nunca buscamos dentro de nosotros mismos. No hacemos más que buscar en el exterior, de ahí que nos perdamos nuestros propios tesoros, nuestro propio reino de Dios.

Osho

Tú eres el silencio


El silencio se entiende normalmente como algo negativo, algo vacío, una ausencia de sonido, de ruidos. Este malentendido subsiste porque muy poca gente ha experimentado alguna vez el silencio. Lo que han experimentado como silencio es la ausencia de ruido.

Pero el silencio es un fenómeno totalmente distinto. Es completamente positivo. Es existencial, no está vacío. Es el fluir de una música que nunca antes has oído, con una fragancia que no te es familiar, con una luz que solamente puede ser vista con los ojos interiores.


No es algo ficticio; es una realidad, y una realidad presente en cada uno, solo que nunca miramos hacia dentro.

Tu mundo interior tiene su propio sabor, su propia fragancia, su propia luz. Y es completamente silencioso, inmensamente silencioso, eternamente silencioso. Nunca ha habido ningún ruido y nunca lo habrá. Ninguna palabra puede llegar hasta allí, pero tú sí puedes llegar.

El propio centro de tu ser es el centro de un ciclón. Lo que ocurra a su alrededor no le afecta. Es el silencio eterno: los días vienen y van, los años vienen y van, las épocas llegan y pasan. Las vidas vienen y van, pero el eterno silencio de tu ser permanece siempre igual: la misma música sin sonido, la misma fragancia divina, la misma trascendencia de todo lo mortal, de todo lo momentáneo.

No es tu silencio. Tú eres el silencio.

No es algo que poseas; tú estás poseído por él, y esa es su grandeza. Ni siquiera estás ahí, porque incluso tu presencia sería un estorbo.

El silencio es tan profundo que no hay nadie ahí, ni siquiera tú. Y este silencio te trae verdad, amor y millares de bendiciones más.

Osho

lunes, 26 de noviembre de 2012

La Ley del Amor...


Gran Abuelo y Abuela! ¿Cómo funciona la Ley del Amor?

El amor lo da todo y no requiere nada.

¿Cómo podemos no requerir nada?

Si todos dieran todo, ¿qué requerirías? La única razón por la que requieres algo es que alguien más lo está reteniendo. ¡Deja de retener!

Esto no podría funcionar a menos que todos lo hiciéramos a la vez.

En efecto, lo que se requiere es una consciencia global.
Sin embargo, ¿cómo se alcanzará? Alguien tiene que empezar.
Aquí está la oportunidad para ti.
Tú puedes ser la fuente de esta Nueva Consciencia.
Tú puedes ser la inspiración.
Sin duda, debes serlo.

¿Cómo empiezo?

Sé una luz en el mundo, y no lo perjudiques. Busca construir, no destruir. Lleva a mi gente a casa.

¿Cómo?

Con tu ejemplo brillante. Busca sólo la Divinidad. Habla sólo con la verdad. Actúa únicamente con amor.
Vive la Ley del Amor ahora y siempre. Da todo, no requieras nada.
Evita lo mundano.
No aceptes lo inaceptable.
Enseña a todos lo que buscan aprender de Mí.
Convierte cada momento de tu vida en una efusión de amor.
Utiliza cada momento para invocar el pensamiento más elevado, pronuncia la palabra más noble, realiza el hecho más sublime. Con esto, glorificas tu Ser Sagrado, y así, también, me glorificas a Mí.
Lleva paz a la Tierra llevando paz a todos aquellos con cuyas vidas estás vinculado.
Sé la paz.
Siente y expresa en cada momento tu Divina Conexión con el Todo, y con cada persona, lugar y cosa.
Aprovecha cada circunstancia, reconoce cada falta, comparte todo el júbilo, contempla cada misterio, camina en los zapatos de cada hombre, perdona cada ofensa (incluyendo las propias), sana todos los corazones, respeta la verdad de cada persona, adora al Dios de cada uno, protege los derechos de todos los seres humanos, preserva la dignidad de cada quien, promueve los intereses de todas las personas, provee las necesidades de los que te rodean, da como un hecho la santidad de cada persona, saca a la luz los mayores dones de tus semejantes, propicia la bendición de todos, y pronuncia la seguridad de su futuro en el firme amor a Dios.
Sé una viva representación de la Verdad más elevada que reside en tu interior.
Habla sobre ti mismo con humildad, para que nadie confunda tu Verdad más Elevada con un alarde.
Habla suavemente para que nadie piense que solo estás llamando la atención.
Habla con amabilidad, para que todos puedan conocer acerca del Amor.
Habla abiertamente, para que nadie piense que tienes algo que ocultar.
Habla con sinceridad, para que no se interprete erróneamente.
Habla con frecuencia, para que realmente se propague tu palabra.
Habla respetuosamente, ya que todos merecen tu consideración.
Habla amorosamente, para que cada sílaba sirva como un alivio.
Habla de Mí en cada expresión.
Haz de tu vida un don. Recuerda siempre: ¡tú eres el don!
Sé un don para cada persona que entre en tu vida, y para todos aquellos en cuya vida tú participas. Ten cuidado de no entrar en la vida de otro si no puedes ser un don.
(Siempre puedes ser un don, porque siempre lo eres, aun cuando algunas veces no te permitas a ti mismo saberlo.)
Cuando alguien entre en tu vida inesperadamente, busca el don que esa persona espera recibir de ti.

Fuente:
Reiki Energía Sanadora

domingo, 25 de noviembre de 2012

El Yoga y el Tantra


¿Cuál es la diferencia entre el Yoga tradicional y el Tantra?.

El Tantra y el Yoga son básicamente distintos. Te llevan a la misma meta, pero los caminos no son solamente distintos sino contrarios.

El proceso del Yoga también es metódico; es una técnica, no una filosofía. Al igual que el Tantra, el Yoga también depende de la acción, del método, de la técnica. La acción te conduce al Yoga, pero el proceso es diferente: en el Yoga tienes que luchar, es el camino del guerrero; en el camino del Tantra no hay que luchar sino, por el contrario, hay que ser indulgente, pero con consciencia. El Yoga es una supresión con consciencia; el Tantra es indulgencia con consciencia.

El Tantra dice que seas lo que seas, lo Supremo no se opone a ello. Es un crecimiento; puedes crecer y ser lo Supremo. No hay oposición entre tú y la realidad; tú eres parte de ella. Por eso, la lucha, el conflicto, el oponerse a la naturaleza, no es necesario; debes de aprovecharlo, utilizar lo que quiera que seas para ir más allá. En el Yoga tienes que luchar contigo mismo para ir más allá; en él lo mundano y el moksha —tú, tal como eres, y lo que podrías ser— son dos cosas opuestas. Suprime, lucha, disuelve lo que eres y podrás alcanzar aquello que puedes ser... Ir más allá, en el Yoga, significa morir; debes de morir para que tu ser verdadero nazca, A los ojos del Tantra el Yoga es un profundo suicidio: debes aniquilar tu ser natural —tu cuerpo, tus instintos, tus deseos, todo. 

Luchando contra el sexo —conscientemente por supuesto— crearás un nuevo centro en tu ser, un nuevo énfasis, una nueva cristalización. El sexo dejará de ser tu energía; luchando contra él crearás una energía diferente, un nuevo centro de existencia. El Tantra dice: utiliza tu energía sexual, no luches contra ella, ¡transfórmala! No pienses en términos de antagonismo, sé amigable con ella. Es tu energía; no es maligna ni nociva. Toda energía es neutral; puede ser utilizada contra ti o a tu favor; puedes crear un bloqueo, una barrera, o puedes hacer de ella un escalón. Se puede utilizar: si se hace correctamente se vuelve amistosa; si se usa equivocadamente se vuelve tu enemiga. Pero no es ni una cosa ni la otra; la energía es neutral. De la forma en que se utiliza comúnmente, se convierte en tu enemiga; te destruye. Simplemente disipas tu energía. El Yoga apuesta por una aproximación opuesta a la mente común; ésta ha sido destruida por sus propios deseos. Por eso el Yoga dice: abandona el deseo, sé sin él; lucha contra él y crea en ti una integridad sin deseo. 

El Tantra dice: sé consciente del deseo; no crees ningún conflicto. Déjate llevar por el con total consciencia; y cuando hagas esto, lo transcenderás. Eres parte de él y, a la vez, no lo eres. Pasas a través de él, pero permaneces extraño.

Osho

Importante


A las cosas importantes las has venido tratando como si no fueran nada.

1. Sé generoso como un río a la hora de ayudar a los otros.
2. Sé compasivo siempre como el sol que te acaricia en primavera.
3. Sé como la noche que todo lo cubre cuando adviertas algún error en los demás.
4. Sé como la muerte que todo lo borra ante el enojo y la cólera.
5. Sé modesto y humilde siempre como lo es la tierra que te acoge.
6. Sé tolerante en toda circunstancia como el océano que todo lo abraza.
7. Muéstrate como eres y sé como te muestras.

Marina Martinez

La belleza de nuestra alma


En términos kabbalísticos, el cuerpo es como la tierra, y el alma es la parte que tiene que ser cultivada y nutrida para ser fructífera. La única forma en que nuestra alma pueda dar frutos en este mundo es si nos damos una oportunidad para escucharla. En otras palabras, necesitamos tomar la decisión proactiva de conectar con aquella parte de nosotros que está más allá del aspecto físico, nuestra alma.

Lo que ocurre la mayor parte del tiempo, sin embargo, es que estamos tan ocupados haciendo cosas (trabajo, personas, negocios, familia) que no nos tomamos el tiempo para ver la belleza que está dentro, el tiempo para hablar con nuestra alma y preguntarle que quiere de nosotros.

Leí dos historias inspiradoras esta semana. Una era sobre una joven mujer quien creó una librería para niños sin hogar para que pudieran leer antes de irse a la cama. La otra fue sobre una joven mujer de una comunidad de Somalia en Minnesota quien estableció una fundación para otorgar a otras personas de Somalia las mismas oportunidades educativas que ella había tenido. Ambas mujeres lograron ir más allá de ellas mismas para traer algo poderoso al mundo, que es esencialmente nuestra misión como seres humanos.

El creador no nos colocó aquí para simplemente vivir, reproducirnos y morir. Él dio a cada uno de nosotros un trabajo específico por hacer para transformar el mundo en un lugar mejor porque hemos vivido en él. Esto no quiere decir que tenemos que volvernos activistas o cambiar cada caso de caos que veamos. Lo que quiere decir, sin embargo, es que necesitamos nutrir ese algo especial dentro, en nuestra alma, que nos dé la habilidad de ir más allá de nuestra naturaleza. ¿Cuál es nuestra naturaleza? Pensar únicamente en nosotros mismos.

Curiosamente, la paradoja de la vida es que cuando pensamos sólo en nosotros mismos, nunca estanos satisfechos. Por ejemplo, pudimos haber comido la mejor comida del mundo y salir del restaurante y decir: “¡Wow! Éste fue un gran lugar para comer”. Pero preguntémonos a nosotros mismo a cerca de esta fabulosa comida un mes después y seguramente no la recordaremos. Pero si vamos a un restaurante con una amiga y le damos algo que la ayude, o quizás la amiga comparte algo non nosotros, puedes estar seguro que recordaremos esa comida. ¿Por qué? Porque hubo un compartir involucrado, y la razón por la que estamos aquí en esta vida es para practicar el compartir tanto en la forma grande como en la pequeña, así como la joven mujer sobre la que leí esta semana.

Nuestro trabajo es manifestar nuestra alma en este mundo físico. De lo contrario, no hay propósito para nuestra vida; de lo contrario, podríamos ser animales y no lo somos. No olvidemos que nuestro cuerpo es sólo una prenda, y que conectamos con la fuerza de la Luz sólo a través de la belleza de nuestra alma.

KAREN BERG

sábado, 24 de noviembre de 2012

Observar.


¿Alguna vez has comenzado a hablarle al televisor cuando estás viendo una muy buena película? Especialmente cualquier película con drama, acción o suspenso; a veces es muy obvio para nosotros lo que los personajes deberían hacer para salir de la peliaguda situación. Si es una película de miedo, yo pienso: "¿por qué ella sube corriendo las escaleras en lugar salir corriendo de la casa?" o si es un film de suspenso digo: "¡Voltéate! ¡El hombre malo está justo detrás de ti!".

Esto no sucede únicamente en las películas, sino también en nuestras vidas. Tal vez veamos un drama desenvolverse entre dos amigos, y pensemos cuán claro es lo que necesitan decir y hacer para resolver sus situaciones. Mientras tanto, tenemos personas en nuestras propias vidas con las que pareciera que no podemos conectar. No sabemos qué decir o hacer para construir un puente entre nosotros y un compañero de trabajo, o cómo arreglar una amistad que se está deteriorando, o estar ahí para un miembro de la familia.

Cuando estamos en el exterior observando tenemos todas las respuestas. Es sólo cuando estamos involucrados en el drama que la verdad se vuelve turbia.

Rara vez vemos las cosas en nuestras vidas con objetividad. Objetividad no significa no preocuparse; es observar nuestras vidas de la forma que lo haríamos si estuviéramos en una película con actores y una escenografía con la que no estamos conectados en una forma fundamental. Cuando vemos las cosas desde la perspectiva de cómo nos afectan y qué es nuestro, inmediatamente conectamos con el Deseo de recibir sólo para sí mismo.

Para conectar con la Luz, tenemos que tratar de observar las cosas desde una distancia, de manera objetiva. La única forma en la que podemos comenzar a saber lo que es correcto hacer es al observar las cosas fuera de nosotros mismos.

Intentemos encontrar al menos un conflicto en nuestras vidas esta semana en la que podamos poner esto a prueba. Tal vez si podemos tomar un poco de tiempo para visualizar en nuestra mente a dos extraños en la misma situación y pedir a la Luz que nos guíe, veremos con mayor claridad qué podemos hacer para ayudar a resolver el problema.

Cuando removemos nuestros sentimientos personales de la situación, nuestros ojos son capaces de ver la verdad con claridad.


Todo lo mejor,
Yehuda

Te enamoras porque no puedes estar solo.


Alguna noche vas a encontrar a tu alma gemela, la persona perfecta que va a satisfacer todas tus necesidades y calmar todos tus sueños, ¿verdad?... ¡Falso!

Esta fantasía que poetas y trovadores son tan aficionados a perpetuar tiene sus raíces en secuencias del vientre materno, en donde estábamos tan seguros y éramos uno. No sorprende el que hayamos anhelado llegar a ese lugar todas nuestras vidas, pero, para exponerlo un tanto de manera brutal, es un sueño infantil. Y es sorprendente que sigamos aferrados a él tan insistentemente, ignorando la realidad. Nadie, bien se trate de tu compañero actual o de un compañero soñado en el futuro, tiene ninguna obligación de entregarte tu felicidad en una bandeja; tampoco podría hacerlo aún cuando quisiera.

El amor nace, no al tratar de resolver muchas necesidades dependiendo de otro, sino de desarrollar nuestra propia riqueza interior y madurez. De esta forma tenemos mucho amor que dar y de esa forma vamos a atraer, naturalmente, amantes hacia nosotros. Este ha sido dicho una y otra vez a través de las épocas; toda la gente religiosa ha estado diciendo: venimos solos a este mundo y nos vamos solos. Todo este "estar juntos" es una ilusión. La misma idea de "estar juntos" surge porque estamos solos y la soledad duele. Queremos ahogar nuestra soledad en una relación... Por eso nos involucramos tanto en el amor.

Trata de ver el hecho. Ordinariamente piensas que te has enamorado de una mujer o de un hombre porque ella es hermosa, él es hermoso. Esta no es la verdad. La verdad es precisamente lo opuesto: te has enamorado porque no puedes estar solo; de todas formas ibas a caer. Ibas a escaparte de ti mismo, de una u otra manera; y hay gente que no se enamora de las mujeres o de los hombres: se enamora del dinero. Empiezan a buscar dinero o una posición de poder: se vuelven políticos. Esto también es escapar de tu soledad. Si observas al hombre, si te observas a ti mismo profundamente, te quedarás sorprendido; todas tus actitudes se pueden reducir a una sola cosa: el asunto es que tienes miedo a tu soledad. Todo lo demás no es sino una excusa. La causa real es que te encuentras muy solo.

Osho

Uno

UNO… Uno siempre cree y se imagina. Uno cree que el dolor roza la piel del otro… y duele hasta pedir socorro… Uno cree que las alegrías son propias y las desparrama por el aire… hasta que llegan renovados jubileos. Uno siempre cree y se imagina. Se imagina que a nuestra piel no le embate el pasar del calendario. A los otros… sí. Que las penas son ajenas. Que las dolencias desconocen nuestro domicilio. Y un día cualquiera ya no cree ni se imagina, porque el sufrir tocó nuestros huesos y se convirtió en una batalla por ganar. Nos quedamos inmóviles en la vera del sentimiento reaccionando ante los vientos contrarios del pensar… Del sentir… Los otros pasamos a ser nosotros. Nosotros pasamos a ser los otros. En esa fusión de los otros y nosotros, coexiste la existencia de lo real… Sin darnos cuenta vamos incorporando los supuestos del etéreo mundo que habitamos y no queremos consumir más bagatelas… Nos sorprende abrir las ventanas y contar las gotitas de la lluvia y deleitarnos en los aromas que emergen de un patio… y entender que el silencio no es sinónimo de soledad sino de un reencuentro. Necesario… Ineludible… Saludable… Afirmo que mi piel se viste con la piel del otro y el otro se viste con mi piel. Escucho… Mi alma me susurra a los oídos y varias voces se mezclan en secretos. Este milagro de meterme en los de afuera produce la magia que ellos, se incrusten en mi ser… Piensan y pienso. Somos todos iguales ante el dolor y la alegría. La perspectiva de igualdad me vuelve inconsistente en esta tarde y me indago y me invento en los otros… Como nunca… Por la vidriera inmortal de las estrellas, se desprenden luces de colores advirtiendo la llegada de una etapa diferente… Cerrando círculos de antaño… Esparciendo manojos de respuestas, con pétalos de esperanzas e ilusiones… Que estimulan mis aciertos y los tuyos. Que fusionan realidades y utopías en el contexto universal de los sentidos…

(PUBLICADO EN MI LIBRO: ABRAZAME VIDA)-
Ester Faride MATAR
Autorìa registrada


Y la hierba crece por sí misma.


El zen no es una filosofía, sino poesía. No propone, sino que simplemente persuade. No discute, simplemente canta su propia canción. Es estético hasta la médula, y para nada ascético. No cree en ser arrogante o agresivo hacia la realidad, sino en el amor. Cree que si participamos con la realidad, ésta nos revelará sus secretos. Crea una consciencia participativa. Es poesía, es pura poesía… igual que es pura religión.

La filosofía está orientada hacia la cabeza; la poesía es más total. La poesía fluye más. La poesía se ocupa más de la belleza. Y la belleza es no violencia, amor, y compasión. El buscador zen mira en la realidad para hallar lo bello... en el canto de los pájaros, en los árboles, en la danza de un pavo real, en las nubes, en los relámpagos, en el mar, en la arena. Intenta buscar la hermosura.

Y claro está, buscar la hermosura tiene un impacto completamente distinto. Cuando buscas la verdad eres más masculino; cuando buscas belleza eres más femenino. Cuando buscas la verdad estás más preocupado por la razón; cuando buscas la belleza estás cada vez más interesado por la intuición. El zen es femenino, la poesía es femenina. La filosofía es algo muy masculino, muy agresivo; es una mente masculina.

El zen es pasivo. Por eso, en el zen sentarse se convierte en una de las meditaciones más importantes. Sólo sentarse... zazen. La gente zen dice que si simplemente te sientas, sin hacer nada, empiezan a suceder cosas. Las cosas empiezan a ocurrir por sí mismas; no necesitas ir tras ellas, ni ellas buscarte a ti, ni tú a ellas. Llegan por sí mismas. Tú simplemente permaneces sentado. Si puedes sentarte en silencio, si puedes caer en una tremenda quietud, si puedes relajarte, si puedes abandonar todas las tensiones y convertirte en un estanque silencioso de energía, sin ir a ninguna parte, sin buscar nada, Dios empieza a verterse en ti. Dios viene a ti desde todas partes. Sólo sentado, sin hacer nada, llega la primavera, y la hierba crece por sí misma.

Osho

viernes, 23 de noviembre de 2012

Tenemos muchas resistencias.


Tenemos muchas resistencias. Si te toco, puedes sentir que te estás resistiendo al contacto, estás creando una barrera, para que mi calor no pueda entrar en ti, mi contacto no pueda entrar en ti. No nos permitimos tocarnos. Si alguien te toca, te pones alerta, y el otro dice: «Perdona.» Hay resistencia por todas partes. Si te miro, te resistes, porque la mirada puede entrar en ti, puede penetrar hondo, puede removerte, y entonces ¿qué harás?

Y esto no es sólo con los extraños. No hay necesidad ni siquiera con los extraños, porque nadie es un extraño y todo el mundo es un extraño. ¿Cómo va eliminarse esa extrañeza con sólo vivir bajo el mismo techo? ¿Conoces a tu padre, que te ha hecho nacer? Es un extraño. ¿Conoces a tu madre? Sigue siendo una extraña. De modo que todo el mundo es un extraño, o nadie es un extraño. Pero tenemos miedo y creamos barreras por todas partes. Estas barreras nos hacen insensibles; entonces nada puede entrar en nosotros.


La gente viene a decirme: «Nadie me ama». Y toco a ese hombre y siento que tiene miedo incluso al contacto. Hay un apartamiento sutil. Tomo su mano en la mía y él se retira. No está en la mano; sólo hay una cosa muerta en la mía: él se ha retirado. Y dice: «Nadie me ama». ¿Cómo va a amarte alguien? E incluso si el mundo entero te ama, no lo notarás, porque estás cerrado. El amor no puede entrar en ti; no hay entrada, no hay puerta. Y estás sufriendo en tu propia prisión.

Si hay ego, estás cerrado: al amor, a la meditación, a Dios. Así que primero intenta ser más sensible, más vulnerable, abierto, dejando que te sucedan las cosas. Sólo entonces puede suceder lo divino, porque eso es lo último que sucede. Si no puedes permitir que te sucedan las cosas corrientes, ¿cómo vas a permitir lo supremo? Porque cuando te suceda lo supremo, tú ya no estarás ahí. Simplemente no estarás.

Osho

¿Por qué me Resulta tan Difícil Quererme?


Cuando aprendas a amarte a ti mismo desaparecerán los sacerdotes, los políticos se quedarán sin seguidores; todos los intereses creados de la sociedad irán a la bancarrota. Se aprovechan de ti de una forma psicológica muy sutil y por eso prosperan.

Los niños nacen con un enorme amor hacia sí mismos. Es la sociedad la que destruye ese amor, es la religión la que destruye ese amor, porque si el niño se sigue amando a sí mismo, entonces, ¿quién amará a Jesucristo? ¿Quién amará al presidente? ¿Quién amará a sus padres? El amor de un niño hacia sí mismo ha de ser desviado. Hay que condicionarle de manera que su amor se dirija siempre hacia un objeto externo. Esto hace al hombre muy pobre, porque cuando quieres a alguien externo a ti -ya sea Dios, el Papa, tu padre, tu esposa, tu marido, tus hijos, cualquiera que sea el objeto de tu amor, te vuelve dependiente de ese objeto. A tus propios ojos te conviertes en algo secundario, te conviertes en un mendigo.

Al nacer eras un emperador totalmente satisfecho contigo mismo. Pero tu padre quiere que le quieras, tu madre quiere que la quieras. Todos a tu alrededor se quieren convertir en objeto de tu amor. A nadie le preocupa que si un hombre no puede amarse a sí mismo tampoco será capaz de amar a nadie. De modo que se crea una sociedad enloquecida, donde todo el mundo intenta querer a alguien, sin tener nada que dar. Y la otra persona tampoco tiene nada que dar.

A un niño debidamente educado se le debe permitir crecer en amor hacia sí mismo, de forma que esté tan lleno de amor que compartirlo se convierta en una necesidad. Está tan repleto de amor que quiere compartirlo con alguien. Entonces, el amor nunca te hará depender de nadie. Tú eres el que da, y el que da nunca es un mendigo. Y el otro también da. Y cuando se encuentran dos emperadores, dueños de sus propios corazones, se produce una inmensa alegría. Nadie depende de nadie; todo el mundo es independiente e individual, centrado en sí mismo, arraigado en sí mismo. Sus raíces van hasta el fondo de su propio ser, de donde brota el néctar llamado amor hacia la superficie y florece con miles de rosas.

Cuando aprendas a amarte a ti mismo desaparecerán los sacerdotes, los políticos se quedarán sin seguidores; todos los intereses creados de la sociedad irán a la bancarrota. Se aprovechan de ti de una forma psicológica muy sutil y por eso prosperan.

Pero aprender a amarse no es difícil, es natural. Si has conseguido hacer algo antinatural, como aprender a querer a los demás sin quererte a ti mismo, entonces lo otro es sencillo. Has hecho casi lo imposible. Sólo se trata de una cuestión de comprensión, una comprensión muy simple, que es:

«Debo amarme a mí mismo; de lo contrario, me perderé el sentido de la vida. No creceré, sino que envejeceré. No tendré individualidad. No seré auténticamente humano, digno, íntegro.»

Por otra parte, si no te amas a ti mismo no puedes amar a nadie más en el mundo. Muchos de los problemas psicológicos aparecen porque has sido alejado de ti mismo. Eres «indigno», no eres lo que deberías ser; debes rectificar tus actos. Te tienes que amoldar a una personalidad determinada.

El amor hacia ti mismo es una necesidad básica para tu crecimiento.

Todo el mundo está lleno de odio hacia sí mismo. Y si te odias, ¿cómo crees que vas a encontrar a alguien que te quiera? Ni si quiera estás listo para quererte a ti mismo; es imposible que te quiera nadie. Has aceptado la idea de que no vales nada a menos que observes ciertas reglas, dogmas religiosos o ideas políticas.

Al nacer no eras cristiano ni católico; no naciste comunista. Cada niño viene al mundo como una tabula rasa, totalmente en blanco. No hay nada escrito -ni la Biblia, ni el Corán, ni el Gita ni el Capital-, no, no hay nada escrito. No trae consigo un libro sagrado, viene con la inocencia más absoluta. Pero su inocencia se convierte en el mayor problema porque está rodeado de lobos disfrazados de políticos, de sacerdotes, de padres, de profesores. Todos se abalanzan sobre tu inocencia. Empezarán a escribir cosas sobre ti y más tarde creerás que son tu legado. Han destrozado tu legado. Ahora ya pueden esclavizarte, convertirte en lo que ellos quieran.

Quiero que te ames completamente. Quiérete, sé tú mismo. No dejes que te distraiga ninguna persona, ya sea religiosa, política, social o educativa. Tu responsabilidad primera no es hacia la religión, ni hacia la nación, es hacia ti mismo. Y fíjate: si todo el mundo se ama y se cuida, su inteligencia llegará a la cima, su amor le desbordará. Para mí, la filosofía del amor propio le hará realmente altruista porque tendrá tanto para compartir y para dar que dar será para él una alegría, compartir será una celebración, El altruismo sólo puede ser un derivado del amor hacia ti mismo.

Como no te quieres, te sientes débil, porque el amor es tu alimento, es tu fuerza. Naturalmente, ¿cómo puedes sentirte responsable? Sigues cargándole a otro con tu responsabilidad. Dios, el destino, o Adán y Eva son los responsables. La responsable es la serpiente, porque sedujo a Eva para que desobedeciera a Dios. ¿Te das cuenta de la idiotez de cargarle toda la responsabilidad a alguien? De esta forma, podemos seguir delegando nuestra responsabilidad sin comprender que no llegaremos a ser verdaderos individuos hasta que no nos hagamos responsables de nosotros mismos. Eludir la responsabilidad es destructivo para tu individualidad. Pero sólo puedes aceptarla si tienes un tremendo amor hacia ti mismo.

Acepto mi responsabilidad y me alegro de hacerlo. Nunca le he cargado mi responsabilidad a nadie porque eso es perder la libertad, es esclavizarse, es estar a merced de los demás. Sea yo quien sea, soy única y absolutamente responsable. Eso me confiere mucha fuerza. Me da raíces, me centra. Pero el origen de mi responsabilidad es que me amo completa y profundamente.

Meditaciones de Osho
Autor: Osho

La Luz de hoy.


¿Cuántas cosas hemos perdido que una vez fueron importantes en nuestra vida? Puede tratarse de una amistad que se desvaneció o de un trabajo que una vez tuvimos. Quizá fuera un(a) ex con quien acabamos la relación de una manera amarga, o un miembro de la familia a quien nunca le expresamos nuestro amor o nuestra gratitud.

Al mirar las cosas de nuestra vida que hemos perdido, debemos preguntarnos: ¿Revelé la mayor cantidad de Luz que pude ahí?

Lamentablemente, la respuesta suele ser no.

Hay un motivo por el cual todo viene a nuestras vidas, y siempre es por la misma razón: revelar tanta Luz como sea posible allí y al hacerlo alcanzar la plenitud.

Lo que realmente perdimos no fue sólo la persona, el trabajo o la relación. Perdimos la oportunidad de revelar Luz...

El problema es que creemos que tenemos una reserva infinita de oportunidades. Pensamos: "Si me pierdo esta, aprovecharé la próxima". Pero lo cierto es que a veces no tenemos el mérito de recibir otra. A veces estamos ahí para ese preciso momento o esa precisa persona, y si los perdemos no conseguimos una segunda oportunidad.

A todos se nos da una cierta cantidad de tiempo para realizar nuestro trabajo. Cada oportunidad tiene su fecha de caducidad espiritual. Sin embargo, nuestro ego siempre tratará de convencernos de que tenemos todo el tiempo del mundo y que nuestro trabajo puede esperar un día más.

La Luz que puede ser revelada hoy, debe revelarse hoy. El mañana contiene un nuevo paquete de Luz para ser revelado.

Si utilizamos cada oportunidad de revelar Luz allí donde vamos, cambiaremos para mejorar.

No sabemos si la Luz que está disponible hoy para ser revelada volverá a nosotros algún día, ni cuándo lo hará.

Todo lo mejor,
Yehuda BERG.

Sin ego no puedes ser derrotado.


El ego siempre está intentando que todo el mundo se acomode a él. Ese es el problema. El hombre que no tiene ego se acomoda al mundo. De hecho, decir que él se acomoda no es correcto; él simplemente se encuentra acomodado.


El ego intenta que todo se acomode a él; eso es muy infantil, es lo que hacen los niños. El niño quiere que todo se haga instantáneamente; todo lo que él desea debe hacerse inmediatamente. Si desea la Luna, hay que dársela inmediatamente, ahora mismo. Ni siquiera puede esperar. El niño quiere que todo y todos se acomoden a él. El niño es un dictador; cuando nace un niño en una familia, cambia todo el ambiente. Convierte a todo el mundo en sirvientes, su dictadura no tiene límites; el ego nace en esa infancia. El ego es el fenómeno más inmaduro: es infantil, inmaduro, no sabe lo que está haciendo.


¿Quién eres tú? ¿Por qué tiene que acomodarse a ti el todo? Tú eres como una ola en el océano y estás intentando hacer que el océano se acomode a ti. Es estúpido. 

Patéticamente estúpido. El todo no necesita acomodarse a ti. No puede ser; es imposible. Puedes seguir creyéndolo, pero serás un fracasado. El ego siempre es un fracasado, porque pide lo imposible. Napoleones, Hitleres, Alejandros; pregúntales. Al final, son grandes fracasados. Personas ricas; pregúntales, al final. Han acumulado mucho, pero en el fondo sienten el fracaso. Puedes acumular poder de muchas maneras, pero tú serás un fracasado. El ego nunca puede ser un triunfador.

Hagas lo que hagas, al final todo el mundo muere. Esto es absolutamente cierto respecto al ego: no puedes vencer. Hagas lo que hagas, aunque seas virtuoso o bueno, si esta virtud y bondad está basada en el ego, no puedes vencer, llevas contigo la semilla de la derrota. Puedes ayudar a la gente, convertirte en un gran sirviente de la sociedad, pero si la base es el ego, no puedes vencer. Puedes hacer millones de cosas buenas, pero si hay ego, hay veneno. Estará envenenado todo lo que hagas. Ya seas pobre, rico; religioso, irreligioso: creyente, ateo; moral, inmoral; criminal, santo; no importa. Con ego no puedes vencer, porque el ego es la semilla del fracaso. Pero sin ego no puedes ser derrotado. Tu victoria es absoluta. Esta es la enseñanza más secreta del Zen.

Osho

jueves, 22 de noviembre de 2012

Ilusiones.


Vivir constantemente en la insatisfacción es tan doloroso que la mente crea ilusiones de satisfacción; esas ilusiones mantienen en marcha a la gente, la ayudan. Si te llevas todas las ilusiones, una persona no dispondrá de ningún motivo para vivir ni siquiera durante un momento más. Son necesarias. En la inconsciencia  las ilusiones son obligatorias, porque a través de ellas creamos falsos significados en la vida, y naturalmente, hasta que lo real haya sucedido, debemos continuar creando significados falsos. Cuando una persona se harta de un falso significado, crea otro. Cuando se harta del dinero, se traslada a la política; cuando se harta de la política, empieza a trasladarse a otra cosa. Hasta la así llamada religión no es más que una ilusión sutil.

La religión verdadera no tiene nada que ver con las así llamadas religiones: el cristianismo, el hinduismo, el islam. La religión verdadera es la destrucción de todas las ilusiones. Es vivir en insatisfacción, en profundo sufrimiento, en absoluto dolor, y buscar lo real.
El sendero es de gran dolor y solo unos pocos lo alcanzan, porque en primer lugar las personas no pueden lanzarse a él; no pueden aceptar el dolor de la vida, pero ese dolor es la fuente de todo crecimiento. Ver la verdad desnuda del todo -sin evitarla ni huir de ella, mirándola de frente- es el comienzo de la inteligencia, el comienzo de la atención, el inicio de la conciencia.

Osho

Libérate


Es la naturaleza humana permanecer donde estamos, continuar haciendo lo que siempre hemos hecho o imitar lo que nuestros amigos y nuestra familia hace, ya sea ir al mismo restaurante en lugar de probar algo nuevo o asistir a la fiesta sólo porque todos los demás irán; este espacio es nuestra zona de comodidad.

Nuestra zona de comodidad incluso puede aplicarse en el área de nuestra espiritualidad. A menudo escogemos un camino espiritual porque es una corriente popular a seguir, una moda pasajera que todos nuestros amigos están probando. Pero la espiritualidad no se trata sobre conformarnos con lo que todos los demás están haciendo para sentirnos aceptados.

Embarcarse en un estilo de vida espiritual es embarcarse en un camino de cambio interno, un camino que requiere que nos sintamos incómodos para que podamos conectar con nuestro mayor potencial y con la Luz que viene del interior.

Liberarnos de la vida con la que nos sentimos familiarizados es muy difícil y vencer tal dificultad es exactamente la razón por la cual tanta Luz puede ser revelada a partir de ello. Por supuesto que no podemos esperar volvernos una persona completamente diferente en un día pero podemos estar conscientes de la necesidad de dar pasos diarios hacia el cambio.

Esta semana, intenta cosas nuevas. Acércate a un extraño que pienses que sería la última persona de quien te harías amigo e intenta conectar con él/ella.

Como mi padre, el Rav, me enseñó y como enseñamos nosotros en el Centro de Kabbalah: En el momento preciso en que una persona escoge salir de su zona de comodidad, La Luz del Creador se conecta con él o ella.

Cuando nos liberamos de nuestra zona de comodidad nos liberamos de nuestras limitaciones y nos adentramos en el espacio de Luz y posibilidades infinitas.

Todo lo mejor,
Yehuda BERG.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

7 Maneras de Experimentar el Poder de la Gratitud el Día de Acción de Gracias



“Cuando todos los días resultan iguales es porque el hombre ha dejado de percibir cosas buenas que surgen en su vida cada vez que el sol cruza el cielo”. (Paulo Coelho)

Las fiestas generalmente son un tiempo cuando las distancias entre los corazones humanos se acortan. El ambiente festivo calienta las corazones y el hielo de antiguas riñas se derrite.

El Día de Acción de Gracias es una fiesta que nos invita a darnos cuenta de todas las bendiciones que recibimos a diario. Aprovechemos estas fiestas para agradecer por todas las personas y acontecimientos en nuestras vidas. Todas: las “buenas”, y las “difíciles” también.


“Bendice a tu enemigo… él te permite crecer…” (Buda)

No hay duda que algunas relaciones son más desafiantes que otras, pero en cada una de ellas hay una lección para nosotros. Lecciones que nos hacen crecer y ayudan a otros a crecer también. Cada relación trae aprendizajes sobre cómo perdonar, cómo amar a uno mismo y a otros, cómo cuidarnos unos a otros, cómo comunicar mejor, cómo confiar en nuestro maestro interior, sobre cuándo soltar…

En vez de enfadarte, criticar o gritar, pregúntate: “¿Qué lecciones trae consigo la persona que tengo delante a mi vida?”. Y agradécela por estar en tu vida, por ser tu maestro.


“De todos los tesoros del mundo, ¿hay algo más precioso que darle a alguien un trozo de tu corazón?”(Anónimo)


Muestra tu gratitud a las personas en tu vida:

  1. Dales tu cariño. Sé generoso con besos, abrazos, palmadas en la espalda y apretones de manos. Estas pequeñas acciones demuestran el cariño por las personas que encuentras en tu camino cada día.
  2. Diles algo agradable. Un simple y sincero “has preparado el mejor pavo relleno que he comido nunca”, “me encanta como cantas” o “me encanta el jersey que me hiciste” puede cambiar el día de alguien. Sé generoso con tus cumplidos.
  3. Pregúntales por sus vidas en vez de ser siempre el centro de la conversación. Muestras un verdadero interés por lo que ocurre en sus vidas y por lo que es importante para ellos.
  4. Escucha de verdad lo que dicen. Pero realmente escucha – sin interrumpir, ni bostezar o criticar. Resiste la tentación de criticar o de corregir. Sólo escucha.
  5. Sonríe. Que las personas a tu lado digan: “Me gusta reír contigo”.
  6. Escribe una nota de agradecimiento. Esto puede ser un simple “gracias por ayudarme”, “gracias por estar en mi vida”… Un detalle como este puede ser recordado de por vida.
  7. Sé amable. La forma más fácil de hacer sentir bien a la gente es decir “Hola” y “Muchas Gracias”. Recuerda que la vida no se mide por el número de respiraciones que tomamos, sino por los momentos que te quitan el aliento.
La gratitud nos ayuda a vivir en el ahora y a estar verdaderamente felices. Es la clave para vivir una vida plenamente ya que nos ayuda a tomar conciencia de todas las bendiciones que recibimos. Y las bendiciones más grandes en nuestras vidas son las personas que nos rodean. Busca maneras de acercar las personas entre sí cada día, no sólo durante las fiestas.

¡Que el espíritu del Día de Acción de Gracias os acompañe todo el año y traiga el amor, la alegría y la paz en vuestras familias y en vuestros corazones!


Fuente: http://comoliberaremociones.com

martes, 20 de noviembre de 2012

Pasos para Liberar tus Miedos

Gestionar "los miedos" es un reto para todas las personas que alguna vez hemos sufrido ansiedad.

Antes de enfrentarte a uno de esos miedos te propongo 3 pasos.


1, Acéptalo. Aceptar algo es el primer paso para poder cambiarlo. Acepta que te sientes mal entre aglomeraciones, o en sitios cerrados; acepta que tu trabajo te ocasiona momentos de ansiedad

2. Observa el Beneficio secundario. Parece una contradicción pero muchas veces el evitar algo,  o no querer salir de una situación nos produce miedo, pero también esconde un beneficio actual.
Si no salgo de mi cama porque estoy triste, o si no asisto a ese curso de formación, me cuidan, no me expongo, etc. Mejor saber que ese “no arriesgar” también tiene su parte buena. 
Te propongo que pienses en un Objetivo Final. Así podrás estimular el cambio.¿Como me beneficiaria de  no tener ese miedo? ¿Que cosas haría mañana mismo si no tuviese miedo? Escribe 3 de ellas.

3, Antes de enfrentar tus miedos, reduce tu ansiedad:
La ansiedad puede disminuir con técnicas de relajación o respiración. Pero ese alivio es transitorio.
Mejor puedes hacerte preguntas concretas que te pondrán en movimiento y ayudarán a calmarte progresivamente:
¿Qué es lo que más temo que me ocurra y cuál es la posibilidad real de que se produzca?
¿Qué es lo peor que podría pasar?
¿Cómo voy a manejar esa situación si ocurriese?

¿Qué es lo que tu haces actualmente para manejar tu ansiedad? ¿Qué cosas te funcionan y que otras no te sirven para nada?

Pensar es el primer paso, pero tomar cualquier acción como pedir ayuda si te sientes atascado, es la mejor manera de comenzar a liberarte de esos miedos.

Fuente:
http://www.liberatuansiedad.com

lunes, 19 de noviembre de 2012

Cuándo dejar tu trabajo

Esta semana voy a responder a una pregunta que me han hecho más de una vez: cuándo dejar tu trabajo. La pregunta en cuestión se puede aplicar a dos situaciones:
  • Cuando estás insatisfecha o estancada y no sabes si merece la pena esforzarte más o dejar el trabajo.
  • Cuando tienes en mente poner tu propio negocio pero tienes miedo de dejar la estabilidad económica que te da tu trabajo.
Sobre la primera parte he hablado en varios artículos que enlazo a continuación. En primer lugar tienes que tener muy claro si estás donde quieres estar, ya sabes que es importante pararte a planificar tu trayectoria profesional para no dejarte llevar por la corriente y darte cuenta, un día, de que estás muy lejos de tu destino inicial. Y lo peor, de que no quieres estar ahí. Por otro lado, si te sientes insatisfecha o estancada, antes de tomar medidas drásticas que impliquen boicotear tu carrera, averigua si puedes hacer algo al respecto (en los enlaces encontrarás más información sobre cómo hacerlo).
Respecto a la segunda parte, en mi experiencia la etapa en la estás considerando poner tu propio negocio es de las más estresantes que conozco. Aparecen todas las inseguridades, dudas y bloqueos habidas y por haber. Miedo al fracaso, a estar a la altura, a conseguir clientes, a no tener dinero, etc. Lo primero que recomiendo es que analices el papel del dinero en tus decisiones profesionales, es importante saberlo.
Además, hay que tener en cuenta que cada caso es único, cada persona es un mundo y lo que me sirve a mi a lo mejor a ti no, como en todo. Así que tampoco te tomes lo que digo al pie de la letra, ¿de acuerdo? Aparte de eso, ¿cuándo es el mejor momento para dejar tu trabajo si quieres establecerte por tu cuenta? Depende.
Hay como mínimo cuatro situaciones diferentes:
  1. Si tienes ahorros o un respaldo económico que te permita vivir sin estrés hasta que tu negocio prospere y estás segura al 100% de que quieres ser emprendedora y vas a hacer que tu negocio funcione sí o sí –> En este caso cuando quieras. Yo suelo recomendar la opción número 2 pero si quieres dedicarle todo el tiempo y te lo puedes permitir, para qué dar más rodeos. (Nota: hacer que tu negocio funcione sí o sí no significa aferrarte a algo y hundirte con el barco si no funciona, sino hacer todos los cambios y ajustes necesarios para que funcione.)
  2. Si tienes algunos ahorros, estás bastante segura de que quieres intentarlo pero te pone nerviosa perder la estabilidad económica que te da tu trabajo –> Esta situación es de las más frecuentes y yo recomiendo seguir con tu trabajo hasta que tu negocio esté en marcha y tengas que elegir entre uno de los dos. Para entonces tendrás más ahorrado, estarás más segura de ti misma y te costará menos. Y con suerte y trabajo duro puede que ya te esté dando beneficios.
  3. Si no tienes un respaldo económico pero tampoco tienes deudas y te permites algunas comodidades –> En este caso puedes aplicarte la recomendación anterior y sumarle recortar lujos para crearte un colchoncito. Recuerda, a veces es necesario un sacrificio a corto plazo para recoger la recompensa a largo plazo. Y aviso el “corto plazo” puede no ser tan corto.
  4. Si no tienes ahorros y estás endeudada o viviendo al límite.  Dejar tu trabajo en este momento no es una opción recomendable, mejor céntrate en salir de ese endeudamiento y cuando el estrés financiero disminuya vuelve a pensar en tu negocio (o considera salir del endeudamiento como el primer paso para empezar tu negocio si te resulta más motivador así.) Mas que nada porque un negocio conlleva unos gastos, es necesario invertir y no es una salida fácil a tu situación. Si alguien te ha dicho que para ganar dinero rápido lo mejor es poner un negocio, no te ha aconsejado bien. Aquí tienes algunas cosas que debes saber antes de empezar tu propio negocio.
Eso es todo, determina cual es tu situación y ponte en marcha. Sí, ya sé lo que tienes mente, ¿de donde sacas tiempo para eso? Sinceramente, es tu negocio, tú decides si de verdad quieres independizarte o no. Así de claro. Si quieres poner un negocio y no puedes dejar tu trabajo por ahora, o pospones la idea o sacas tiempo de donde sea (horas de televisión, fines de semana, etc) hasta que sea viable. No es fácil, es sacrificado, pero en este caso es lo más sensato. Dejar tu trabajo sin un respaldo económico de al menos un año es una locura. Pero es tu elección.
Autora: Aida Baida Gil